Empresas y finanzas

Fomento licitará las autopistas en quiebra sin la "mochila" de la deuda

    Íñigo de la Serna, ministro de Fomento

    Javier Mesones, África Semprún

    El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, aseguró ayer que el Gobierno sacará a concurso público la concesión de las nueve autopistas de peaje en riesgo de quiebra una vez sean liquidadas y revertidas al Estado. Lo hará sin "la mochila" que supone la deuda de estas carreteras.

    Sin ella, de hecho, considera que "son viables" y "el ebitda (resultado bruto de explotación) es positivo", de forma que "incluso generaría unos ingresos no despreciables para el Gobierno". No en vano, el tráfico de todas las autopistas crece y, en algún caso, hasta el 20 por ciento.

    No habló de plazos, pero fuentes ministeriales señalaron que una vez sean asumidas, la intención del Ejecutivo es licitarlas con celeridad. Con ello, evitará los costes asociados al mantenimiento, conservación y personal de estas vías. El coste anual por estos conceptos asciende a 65 millones.

    La Sociedad Estatal de Infraestructuras del Transporte (Seittsa) será la encargada de gestionar las autopistas y, según dijo el ministro, ya se está preparando para ello. El calendario en que Fomento deberá hacerse cargo de las concesiones está supeditado a la evolución de los procesos legales. No en vano, los de la Circunvalación de Alicante y la R3 y R5 "se han retrotraído" a la fase común del concurso de acreedores, tal y como recordó De la Serna durante el Ágora de El Economista patrocinado por EY y OHL. Esto, en su opinión, "son buenas noticias, puesto que nos permite tener un margen mayor para maniobrar".

    El distinto ritmo de cada proceso puede favorecer al Gobierno, ya que de ese modo la Responsabilidad Patrimonial de la Administración (RPA) que habrá de pagar se espaciará en el tiempo. De la Serna no entró a dar cifras sobre el coste, pero estará "por debajo" de los 3.000 millones, dijo, frente a los más de 5.500 millones que estima Seopan -incluidas expropiaciones y créditos participativos-.

    El ministro evitó detallar cómo se articulará el traspaso, aunque sí dejó la puerta abierta a que no todas sean agrupadas. Esto derivaría de la diferente evolución de los concursos. "Seittsa será la encargada de la gestión de estas infraestructuras, de tal modo que las prepare para un proceso de relicitación en la forma que queda por definir", subrayó. "Hay que ver cómo y cuándo", abundó. La decisión llega después de que Fomento tratara sin éxito de alcanzar "acuerdos con los tenedores de la deuda" de las autopistas, es decir, los fondos que se la han comprado a los bancos a precio de derribo.

    De la Serna también se refirió a la reversión de las autopistas cuya concesión vence en los próximos años. "A partir de finales de 2018 van cayendo todas sucesivamente, porque se cumplen los plazos" y "el Gobierno no las va a prorrogar". Eso sí, "tendrá que decidir cuál es el escenario".