¿Cómo ha preparado Amancio Ortega el futuro de Inditex y su sucesión?
- Así se garantiza que no se divide la participación principal
- El empresario posee más del 50% del gigante textil
elEconomista.es
El fundador de Inditex, Amancio Ortega, trasladó en 2015 su participación mayoritaria de la compañía a Pontegadea, la firma inversión inmobiliaria del empresario, para asegurar el control familiar de la empresa tras su fallecimiento. l Inditex ya está a un 2% de máximos históricos tras el 'empujón' de Morgan Stanley
Amancio Ortega, de 81 años, ha garantizado su sucesión y control en Inditex con el traspaso de su 50% a Pontegadea, su brazo inversor que hasta ahora estaba dedicado a la inversión inmobiliaria, según consta en el Registro Mercantil. Los familiares del empresario heredarán la participación correspondiente de Pontegadea que cuenta además con activos superiores a los 6.000 millones de euros.
"La prioridad absoluta para Ortega es garantizar el futuro de Inditex y asegurarse que su participación de control no se diluye en la herencia", ha explicado una fuente cercana a Pontegadea a Reuters. De esta manera, el 50% de Inditex seguirá unido bajo el paraguas de Pontegadea y no será dividido entre sus herederos cuando el empresario fallezca.
Muchos imperios familiares han perdido el control de las compañías tras fallecer sus fundadores a manos de terceros inversores ajenos al núcleo familiar. Las familias Cadbury o Ashley perdieron las riendas del negocio cuando fallecieron sus fundadores y se partió la participación principal.
La familia de Laura Ashley ya no tiene vinculación con la empresa textil que lleva su nombre y el gigante estadounidense Kraft compró en 2010 el fabricante de chocolate Cadbury. Diez años la participación de control se había repartido entre los herederos de Dominic Cadbury.
Ortega sigue el ejemplo de otros imperios textiles. Giorgio Armani creó una fundación para que la participación principal quede intacta. Hans Wilsdorf, fundador del fabricante de relojes de lujo Rolex, colocó todas sus acciones de la Fundación Hans Wilsdorf en 1944 , la entidad ha gestionado la empresa desde su muerte en 1960.
Muchos imperios familiares han perdido el control de las compañías tras fallecer sus fundadores a manos de terceros inversores ajenos al núcleo familiar. Las familias Cadbury o Ashley perdieron las riendas del negocio cuando fallecieron sus fundadores y se partió la participación principal.
La familia de Laura Ashley ya no tiene vinculación con la empresa textil que lleva su nombre y el gigante estadounidense Kraft compró en 2010 el fabricante de chocolate Cadbury. Diez años la participación de control se había repartido entre los herederos de Dominic Cadbury.
Ortega sigue el ejemplo de otros imperios textiles. Giorgio Armani creó una fundación para que la participación principal quede intacta. Hans Wilsdorf, fundador del fabricante de relojes de lujo Rolex, colocó todas sus acciones de la Fundación Hans Wilsdorf en 1944 , la entidad ha gestionado la empresa desde su muerte en 1960.
"Despeja cualquier temor a que en caso de la muerte de Ortega las acciones salgan al mercado", indica Adam Cochrane, analista del sector de UBS. Richard Hyman explica a Reuters que la medida es una forma de proteger las marcas de Inditex, que además de Zara incluye a Massimo Dutti o la cadena de moda adolescente Bershka, "es difícil predecir lo que va a ocurrir en la industria textil, pero el blindaje de la protección de la participación mayoritaria reduce las posibilidades de una adquisición que podría conducir a reducciones de costos que terminan dañando la marca".
Brazo inversor
La información mercantil de Pontegadea indica que Ortega es el presidente, mientras su esposa Flora Pérez y su socio José Arnau son vicepresidentes. Arnau, también es vicepresidente del Consejo de Administración de Inditex. La mano derecha de Ortega fue inspector de Hacienda y ha participado activamente en la gestión de la riqueza personal de Ortega desde 1997.
Por su parte, Flora Pérez es la segunda esposa de Ortega. Se separó de su primera esposa Rosalía Mera en la década de los ochenta. Pérez tiene un asiento en la junta de Inditex como representante del 50% de Pontegadea. Los hermanos de Flora Pérez también ocupan posiciones clave. Óscar Pérez es director de Zara mientras que Jorge es el director de Massimo Dutti.
Ortega tiene tres hijos: su hija con Pérez, Marta, de 33 años, que trabaja en Zara, y sus dos hijos de su primer matrimonio, Sandra, de 48 años, y Marcos, de 46 años, ninguno de los cuales han seguido carreras en Inditex. Sandra, el segundo mayor accionista de Inditex, con una participación del 5,05%, trabaja en una organización benéfica de Galicia centrado en ayudar a las personas con discapacidad a encontrar trabajo.
Ortega dejó la gestión de Inditex en manos de Pablo Isla, de 53 años, en 2011. Una decisión que eliminó la incertidumbre sobre los planes de sucesión. Desde que está al frente de la compañía se ha triplicado el valor.