El Gobierno ya ha pagado casi 800 millones por las radiales

El Estado ya ha desembolsado entre 700 y 800 millones de euros por los costes de expropiación de las nueve autopistas de peaje en riesgo de quiebra, sobre un total estimado de entre 1.000 y 1.200 millones.

Son los cálculos de la patronal de las constructoras, Seopan, que estima además un importe de 4.032 millones por la Responsabilidad Patrimonial de la Administración (RPA) ligada a estas vías y de 625 millones por los préstamos participativos y las cuentas de compensación no recuperables. En total, el agujero para las cuentas públicas oscilaría entre los 5.657 y los 5.857 millones si las concesiones son liquidadas y asumidas por Fomento.

El presidente de Seopan, Julián Núñez, avanzó ayer que el plan que Fomento puso sobre la mesa en su momento ya no es viable por su impacto en el déficit público, pero abrió la puerta a que se implementen "soluciones individuales" para las distintas autopistas en concurso de acreedores. En esta línea, señaló que una reciente sentencia ha devuelto el proceso de la Circunvalación de Alicante (Ciralsa) a la fase de convenio, toda vez que la propuesta que presentó la concesionaria cumplía la ley, frente a lo estimado por un juzgado en mayo de 2016, como informó elEconomista el pasado 23 de marzo.

Núñez reivindicó la necesidad de implantar un nuevo modelo concesional, después de un 2016 en el que la licitación pública de concesiones se contrajo el 73%, hasta apenas 166 millones -un 98% menos que en 2010-. En obra civil retrocedió el 4%. La contratación pública, por su parte, cayó el 33%.

En enero y febrero el recorte continuó, con un descenso del 19%, y la previsión de Seopan para 2017, con los Presupuestos aún en cuarentena y una no disponibilidad de 5.000 millones, es que la obra civil bajará el 12%. El empleo cayó el 12% en 2016 (2.600 puestos perdidos) y la patronal estima que se seguirá destruyendo.