Empresas y finanzas
El 77% de la recaudación autonómica proviene de los tributos sobre el agua
- Representan más del 90% de los recursos propios autonómicos
- Los cánones eólicos recaudan 60 millones al año
Tomás Díaz
El 77,3% de todo lo que recaudan las comunidades autónomas con sus impuestos propios lo obtienen a partir de los cánones relacionados con el tratamiento del agua. Son más de 1.134 millones de euros al año, y en esa cifra no se incluye lo recaudado por Castilla-La Mancha y Castilla y León, cuya imposición tienen la figura tributaria de tasa.
Así se desprende del exhaustivo Panorama de la Fiscalidad Autonómica y Local, elaborado por el Consejo General de Economistas y presentado recientemente. Este documento analiza todos los tributos propios de las comunidades autónomas, la mayoría de ellos de carácter ambiental. La entidad subraya la dificultad que hay para obtener información; de hecho, sus datos corresponden al ejercicio de 2014, último en el que se pueden obtener con detalle, y, en tres casos, los de Madrid, Asturias y Canarias, los números provienen de la recaudación del año 2011.
Buena prueba de lo polifacéticas y complejas que son las cuentas del agua y de la dificultad de encontrar los datos, es que el informe indique que Cataluña recauda del agua 470 millones de euros, mientras que Madrid sólo 1,7 millones; obviamente, en esta segunda comunidad se emplean otras vías para sufragar la depuración de las aguas residuales urbanas.
Los tributos más importantes
Sea como fuere, los tributos sobre el agua son los más importantes de todos los que han creado los gobiernos regionales, aportándoles el 77,3% de lo que recaudan; sólo en Extremadura y en Madrid existen otros impuestos que generan más ingresos, y en varios casos -Andalucía, Baleares, Murcia y Valencia- representan más del 90% de la recaudación por impuestos propios.
La gran mayoría de los cánones del agua aplicados por las autonomías tienen la condición de finalistas, es decir, se dedican exclusivamente al agua, aunque hay casos en los que, una vez en la caja común, se emplean para cubrir otros gastos corrientes.
La mayoría de los impuestos propios de las comunidades autónomas son ambientales, o falsamente clasificados como ambientales, como sucede con los que gravan las grandes superficies comerciales.
A pesar de su relativa importancia numérica -hay 79 impuestos propios-, las 17 comunidades autónomas apenas consiguen con ellos el 2,2% de sus ingresos tributarios. Cataluña es una excepción, con el 29,9%, seguida de Canarias -caso particular-, con el 21,2%, y Valencia, con el 12,3%.
Varios de estos impuestos están en suspenso, bonificados al ciento por ciento o declarados inconstitucionales; en algunos casos, el Consejo considera que la recaudación es tan pequeña que, muy probablemente, no se cubren los gastos de gestionarlos.
Los cánones eólicos recaudan 60 millones
Los polémicos tributos sobre los parques de aerogeneradores sumaron 61,4 millones de euros en 2015, a razón de 14 millones del canon eólico de Castilla-La Mancha, más 21,4 millones del Impuesto sobre la afección medioambiental causada por determinados aprovechamientos de agua embalsada, por parques eólicos y por las instalaciones de energía eléctrica de alta tensión de Castilla y León, otros 23,1 millones del canon eólico de Galicia y otros 2,9 millones del Impuesto sobre actividades que inciden en el medio ambiente de Valencia.