Empresas y finanzas

Una subasta renovable con ofertas negativas, pero descuentos máximos

  • Se pude pujar por rechazar 9 euros de los ingresos del mercado

Tomás Díaz

La subasta de ayudas para la instalación de nueva potencia renovable que se celebrará durante el primer semestre, probablemente el mes que viene, tiene a más de uno de los interesados en concurrir echando humo por las orejas para comprender sus reglas y diseñar una oferta, algo ciertamente abstruso.

Para que se hagan una idea, las pujas seguirán un proceso descendente en el que no gana la oferta más baja, sino aquella que, en relación a los parámetros de unas instalaciones-tipo diseñadas por el Ministerio -una para la eólica, otra para la fotovoltaica y otra para las demás tecnologías limpias-, precise un menor volumen de ayudas que añadir al precio del mercado eléctrico. Puede ocurrir que una oferta más baja quede peor que otra más alta al relacionar ambas con las instalaciones-tipo de referencia.

A mayor complejidad, resulta que a partir de un determinado nivel de descuento sobre el nivel de los incentivos en almoneda -del 41,3% en el caso de la solar, del 44,1% para la eólica y del 75,4% para las demás- éstos desaparecen..., pero no por ello se frenan los descuentos; es más, las reglas del concurso indican que pueden tener valores negativos, es decir, que los participantes lleguen a ofrecer ingresar menos que el mercado eléctrico.

Y para rematar, resulta que las ofertas tienen un suelo, un nivel a partir del cual no pueden ser más bajas, del 66% para la eólica, del 59,8% para la fotovoltaica y del 98,9%para las demás.

Intentando traducir todo esto, digamos que una planta eólica puede pujar por obtener el más que dudoso premio de rechazar hasta 9 euros por MWh de los ingresos que obtenga del mercado eléctrico.

Los guarismos que hacen los concursantes son, por lo tanto, gordianos. Eso sí, los que al final decidan participar sin tenerlas todas consigo tendrán el consuelo de que, si ganan, la regulación les garantiza una rentabilidad razonable de 300 puntos básicos sobre las Obligaciones del Estado a 10 años que se revisa de sexenio en sexenio.