Empresas y finanzas

Spinal Tap se reúnen de nuevo para demandar a Vivendi por 375 millones

  • La falsa banda cree que los ingresos de la película están falseados
Imagen promocional de la película <i>This is Spinal Tap</i>. <i>Getty</i>

elEconomista.es

Los integrantes de la falsa banda de heavy metal Spinal Tap se han vuelto a unir y no para subirse a un escenario, sino para sumarse a la demanda del actor Harry Shearer, que pone voz a Ned Flanders o Montgomery Burns en Los Simpsons, contra Vivendi por la explotación de la película que les dio la fama.

El rockumentary This is Spinal Tap lanzó a la fama a la banda fake, aunque la reacción inicial del público fue fría, con los años alcanzó el estatus de mito. A pesar de que la formación estaba formado por actores y era una parodia de los grupos de heavy metal en decadencia, su éxito fue tan rotundo que grabaron discos e incluso realizaron gira por Estados Unidos. Todo ese material ha sido explotado durante años por el gigante francés Vivendi.

Los actores Christopher Guest, Michael McKean y el director Rob Reiner, se han unido Harry Shearer, conocido por ser las voces de Ned Flanders o Montgomery Burns en Los Simpsons, en la demanda contra el grupo de entretenimiento.

Christopher Guest, Michael McKean y Harry Shearer formaron parte de Spinal Tap, la mítica banda de heavy protagonista de un falso documental dirigido por Rob Reiner que mostraba el declive de la agrupación. La película fue estrenada en 1984 y aunque tuvo en principio un estreno modesto, los amantes de la música y del género lo han convertido en un filme de culto.

El éxito posterior de la producción llevó a sus protagonistas a grabar discos y realizar una gira, generando ingresos millonarios para Vivendi, quien tiene los derechos sobre la banda sonora y la propia película. El primero en denunciar a la compañía fue Harry Shearer por no compartir los ingresos generados por los vídeos y música del grupo, que fue creado por los cuatro componentes. Shearer estimó que le correspondía 127 millones.

Piden daños y perjuicios

La nueva demanda incluye daños y perjuicios para los cuatros componentes por "prácticas anticompetitiva y contabilidad fraudulenta", explica Reiner, el director de la película, en un comunicado. "La gravedad del asunto se debe a la ocultación de los beneficios y la manipulación de los ingresos a través de las distintas filiales de Vivendi", ha indicado el que encarnó a Marty DiBergi, director del documental en la cinta.

Según la denuncia, las ventas por la banda sonora de la película ascendieron a 92 millones de euros entre 1989 y 2006. Mientras los ingresos generados por la comercialización de la película en todo el mundo hasta 2006 fueron de 76 millones.

This is Spinal Tap recaudó en taquilla apenas 4,5 millones de dólares, según Box Office Mojo. Pese a su modesto paso por los cines, en España ni si quiera se llegó a estrenar, forma parte de las obras destacadas por su aportación cultural en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos.