Empresas y finanzas

Adigital: "El futuro de la economía pasa por lo digital, por ello las leyes deben adaptarse más rápido"


    Sérvula Bueno

    La irrupción de la economía digital ha transformado los principios de casi todos los sectores. En mayor o menor medida, las empresas han ido adaptando su actividad al nuevo paradigma protagonizado por Internet, las tecnologías digitales y las TIC.

    José Luis Zimmermann ha seguido muy de cerca los pasos de este fenómeno desde sus inicios. Tanto es así que su trayectoria le hizo ser el candidato idóneo para dirigir una de las asociaciones más importantes en esta materia. Desde hace diez años, Adigital -Asociación Española de la Economía Digital- tiene a este economista vinculado al marketing y a la comunicación al frente y, como él mismo indica, "durante este tiempo, hemos aumentado el ámbito de actuación de la asociación, pasando del comercio electrónico a todo el arco de negocios digitales".

    ¿Cómo definen desde Adigital el sector de la economía digital y cuál es su situación actualmente?

    Como tal, no es un sector, por lo tanto es difícil definirlo. Todo lo que sucede en el entorno digital es lo que entra dentro de ese recipiente que llamamos economía digital, que es de muy difícil evaluación y análisis, ya que es una herramienta de transformación. De este modo, conocer de qué manera el entorno digital impacta en la economía es complicado. Ahora mismo, a nadie se le escapa que no se puede contar sin Internet para hacer negocios. De hecho, hoy en día hasta una pequeña tienda emplea herramientas digitales sofisticadas. Lo que sí se puede hacer es trabajar sectorialmente, es decir, desde la asociación vamos a analizar el impacto de este fenómeno en entornos concretos.

    ¿En qué sectores ha incidido con más fuerza la economía digital?

    En el comercio el impacto es obvio, no sólo como canal en el ámbito electrónico, sino también en cuanto a los procesos de digitalización. A pesar de ello, aún estamos lejos de que el comercio electrónico signifique en términos de transacciones lo mismo que el offline. El turismo es otro de los ámbitos donde más impacto ha tenido -reserva de billetes aéreos, vacaciones, alojamiento hotelero, etc.-. Por su parte, la banca fue uno de los primeros segmentos en digitalizarse. En nuestro país, la relación con este sector enseguida fue online. Por último, sectores como transportes o energía también están sufriendo cambios debido a este fenómeno.

    Respecto a la regulación, ¿cuáles son las mayores dificultades que encuentra la economía digital?

    El reto está en adaptar la regulación de hoy al nuevo fenómeno. Constantemente pasa que cambios regulatorios muy relevantes, como pueden ser temas de privacidad, tardan mucho tiempo en ponerse en marcha, y cuando lo hacen quedan obsoletos. Por lo que la regulación tiene que ser más rápida, adaptada al futuro y ajustada al cambio tecnológico. En Europa, las barreras regulatorias crean un entorno difícil para hacer negocios.

    ¿Qué reivindica Adigital a las fuerzas políticas en este sentido?

    Es muy importante ver que no hay futuro de la economía sin lo digital. Lo ideal sería que el presidente del Gobierno estuviese muy cercano a este fenómeno y tuviese a personas próximas a él que pudieran asesorarle sobre el tema. No hay un sector digital como tal; es un elemento que transforma todo y alguien debe tener visibilidad sobre lo que se puede hacer en diferentes ámbitos. Pero hay que tener esa capacidad y España hoy no la tiene.

    ¿Por dónde pasa el futuro de la economía digital y el de Adigital?

    Vamos hacia un panorama en el que todo lo que pueda ser digitalizado se va a digitalizar. Con respecto a nosotros, estamos en una fase de verticalizar las actividades y trabajar sectorialmente allí donde podamos ayudar más y, por supuesto, seguir con el tema regulatorio.