Empresas y finanzas
Audax reabre la primera de las 29 plantas de purines
- El sector cobrará menos de 300 millones al año
- El IDAE ya trabaja en la nueva retribución
- Las plantas precisan una inversión mínima de un millón para volver a operar
Tomás Díaz
Audax Energía reanuda hoy la producción eléctrica con su planta de tratamiento de purines de Miralcamp (Lérida), después de tres años de inactividad.
La de Audax es la primera de las 29 plantas similares que vuelve a operar, después de que una sentencia del Tribunal Supremo del pasado mes de junio obligase al Ministerio de Industria a incrementarles las ayudas antes de que acabe el próximo mes de octubre.
La sentencia, a la que tuvo acceso elEconomista, es la primera, y hasta el momento la única, que obliga a anular parte de la reforma eléctrica acometida por el Ministerio de Industria hace tres años, que se saldó con una reducción de los ingresos de las renovables, la cogeneración y el tratamiento de residuos de unos 2.000 millones de euros anuales.
En el caso de las plantas de purines, el Ministerio aprobó una bajada de la retribución del 40%, provocando su cierre y un serio problema para las 2.000 explotaciones porcinas que les remitían unos 2,5 millones de metros cúbicos de purín, deyecciones de cerdo muy contaminantes.
Este recorte retributivo dejó las ayudas de las centrales de purines al mismo nivel que las de las plantas de cogeneración, pero, como subraya Mónica Costa, secretaria general de la Asociación para el Desimpacto Ambiental de los Purines (Adap), "fue un error", porque las plantas de purines no tienen los mismos costes, ni las mismas opciones de negocio -no pueden vender su calor útil- y, lo que es más importante, cumplen una finalidad diferente: el tratamiento de un residuo.
Tras la sentencia, el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE) se ha puesto a preparar un incremento de las ayudas para cumplir el mandato judicial y ya se han producido contactos entre este organismo dependiente del Ministerio y Adap, al objeto de acordar unos ingresos que permitan la reactivación de las centrales.
Menos de 300 millones
Antes de la reforma eléctrica, las 29 instalaciones -de Iberdrola, Gas Natural Fenosa, Abengoa, EDP, EDF, Sener, Ros Roca y otras empresas- cobraban primas por unos 300 millones de euros anuales. Este es el monto que, como máximo, volverán a percibir, presionando al alza la tarifa eléctrica a partir del próximo año.
No obstante, es muy difícil que las ayudas alcancen esa cantidad, porque en estos tres años se ha desmantelado alguna planta, las que quedan precisan -según los cálculos de Adap- una inversión mínima de un millón de euros para volver a funcionar y aún no se sabe quiénes la acometerán y quiénes no. Hay quien apuesta a que las ayudas rondarán los 150 millones anuales.
Audax no espera
Aunque aún no se haya aprobado el citado aumento retributivo, Audax ha decidido volver a poner en funcionamiento su instalación, de 15 MW, confiando en que se le reconozcan los costes en los que está incurriendo, aunque con los ingresos que obtiene ahora apenas paga el gas natural que usa como combustible principal.
Así lo indica Josep Capdevila, director general de Audax Green, la filial de renovables de Audax, quien no concibe que la nueva retribución contravenga la sentencia del Supremo y no le permita a la empresa obtener una rentabilidad razonable.