Veolia y Suma Capital arrancan la mayor red de calor de España

Veolia ha puesto en marcha la mayor red de calefacción y agua caliente sanitaria de España. Situada en Móstoles (Madrid), ha requerido dos años de trabajo y una inversión de siete millones de euros. Se alimenta con biomasa y presta servicio a unas 3.000 viviendas de 16 comunidades de propietarios, a los que proporciona un ahorro del coste energético del 15%. A corto plazo se espera invertir otros cinco millones en ampliarla parar llegar hasta las 7.000 vivendas.

La red, denominada Móstoles Ecoenergía, es propiedad mayoritariamente de Suma Capital, por medio de su Suma Capital Energy Eficiency Found I (60%) y de Veolia (30%).

La red está compuesta por cuatro kilómetros de tuberías soterradas y 16 subestaciones de intercambio en cada uno de los puntos de consumo, más una central témica de biomasa con 12,5 MW de potencia -de propiedad municipal- equipada con un sistema de filtros para las emisiones que permite cumplir la normativa vigente y la prevista en los borradores de legislación de la UE. Un grupo electrógeno auxiliar garantiza que no habrá interrupciones del servicio. Evitará unas 9.000 toneladas anuales de CO2.

Durante la ejecución del proyecto ha habido que reformar las salas de calderas de las comunidades de propietarios, que estaban en mal estado de conservación.

Veolia, además de participar en la sociedad y de haber construido la red, se encarga de operarla -incluida la central térmica- con un contrato de 10 años de duración firmado con las mancomunidades de vecinos. También le suministra el combustible -casi 6.000 toneladas anuales de astillas forestales- obtenido en las plantaciones que su filial Enerbosque Extremadura tiene en Monterrubio de la Serena (Badajoz). Las astillas se almacenan en un silo con capacidad de alimentar el sistema durante cinco días a máxima demanda.

Según comenta Pedro Prádenos, Director de Operaciones e Industria de Veolia, a la vuelta del invierno, dependiendo de factores comerciales y administrativos, espera arrancar una expansión de la red para llegar hasta las 7.000 viviendas, lo que le exigirá a la empresa una inversión adicional de cinco millones.