Empresas y finanzas

Grifols busca salir de Tigenix, donde es el máximo accionista


    Alberto Vigario

    La farmacéutica catalana Grifols ya no considera estratégica su participación en la biotecnológica Tigenix, compañía en la que es el máximo accionista desde que en 2013 comprara el 21,3 por ciento de las acciones por 12 millones de euros. Desde entonces, el grupo de hemoderivados se ha ido diluyendo en la firma, sin acudir a distintas ampliaciones de capital, y actualmente ostenta sólo un 16,9 por ciento del capital, aunque sigue siendo la participación mayoritaria.

    Ahora, según reconoce la propia Grifols, "los administradores del grupo han concluido que la influencia significativa sobre la inversión en Tigenix ha cesado". Así se recoge en el informe sobre los estados financieros intermedios realizado por la compañía a fecha 30 de junio de 2016. Los motivos por los que se ha llegado a esta conclusión son -asegura el informe- "la renuncia de los derechos preferentes para distribuir el principal fármaco investigado por Tigenix y el hecho de que el grupo Grifols ya no dispone de ningún miembro en el consejo de administración, ni espera que en un futuro lo tenga".

    Hay que recordar que la empresa biofarmacéutica Tigenix anunció el pasado 5 de julio el inicio de la retirada de la autorización de comercialización de su producto ChondroCelect -indicado para tratar las lesiones de cartílago de rodilla- al no obtener los resultados comerciales previstos. Tras esta decisión, Tigenix rompió también las relaciones con la empresa Sobi y con PharmaCell, ésta última encargada de la fabricación.

    Grifols asegura ahora que como consecuencia de estos dos hechos acaecidos en su relación con Tigenix, la inversión en la biofarmacéutica se ha reclasificado a "Activos financieros mantenidos para la venta". Este apartado es usado habitualmente por las empresas para encuadrar en el balance aquellos activos sobre los que se ha dejado de tener una participación de control, así como para encuadrar a aquellas sociedades dependientes sobre las que se ha tomado la decisión de su venta en el corto o medio plazo. A preguntas de elEconomista, la compañía no ha querido confirmar ninguno de estos dos extremos y se remite al texto del informe.

    Valorada en 24 millones

    Grifols ya ha realizado la valoración de una posible venta de su participación mayoritaria en Tigenix. "El efecto de esta reclasificación ha resultado en una reevaluación de la inversión a valor razonable, de tal modo que se ha reconocido una ganancia de 24 millones de euros en el epígrafe beneficio o pérdida de entidades valoradas al método de la participación en la cuenta de pérdidas y ganancias. El valor razonable ha sido determinado en base al valor de cotización de las acciones de Tigenix a 30 de junio de 2016", según el informe.

    De todas formas, Grifols posee desde 2015 una suscripción de 25 millones de euros correspondientes al 9 por ciento de los bonos convertibles emitidos por Tigenix, con vencimiento en 2018. Según esta compra, durante los periodos o hasta los hechos descritos en el contrato que rige dichos bonos, los bonos convertibles pueden ser convertidos en capital de Tigenix. La firma cotiza en Bélgica, aunque desarrolla la I+D en Madrid, desde que se fundó originariamente en 2001 con el nombre de Cellerix por la exministra Cristina Garmendia.