Telefónica reactiva los planes para sacar a bolsa sus filiales O2 y Telxius
- Contrata a Morgan Stanley, UBS, Herbert Smith y Ashurt para preparar la OPV de la firma inglesa
- Baraja colocar entre un 25% y un 35% de la 'teleco', aunque no cierra la puerta a venderla a un tercero
África Semprún
La incipiente recuperación de los mercados tras el Brexit (la decisión de Reino Unido de abandonar la Unión Europea) ha animado a Telefónica a acelerar la salida a bolsa de O2 y Telxius.
La teleco ha dado ya los primeros pasos para colocar en el mercado entre el 25 y el 35 por ciento de su filial británica y busca activamente una ventana para reactivar la OPV (Oferta Pública de Venta) de hasta el 40 por ciento de su compañía de infraestructuras, después de verse obligada a congelar la operación por la inestabilidad bursátil. Fuentes cercanas a la multinacional que preside José María Pallete aseguran a este diario que las dos operaciones se están moviendo en paralelo pero que, en todo caso, Telxius saldrá a cotizar en los mercados antes que O2 UK.
"Telefónica puede sacar a bolsa a las dos empresas a la vez, pero no lo va a hacer. Es imposible que las OPV coincidan en el tiempo ya que antes saldría Telxius que O2. Nunca se ha parado la salida de la compañía de torres y redes y, si todo va bien, se espera que salga dentro de poco aunque no hay una fecha fijada", aseguran estas mismas fuentes. Analistas consultados por este diario ven una ventana abierta a la vuelta del verano que puede cerrarse de cara a noviembre si el miedo a que Donald Trump gane las elecciones en EEUU se apodera de los mercados. De momento, la calma parece que ha vuelto al parqué: la bolsa londinense (Ftse 100) está en máximos del año y ha superado los desplomes pre-Brexit, la libra recupera terreno frente al dólar y el euro y el selectivo español se aleja de mínimos.
Primeros pasos
Tras el veto de la Comisión Europea a la venta de O2 Reino Unido al grupo chino Hutchison, operación valorada en su día en unos 13.000 millones de euros, y ante la dificultad de encontrar un nuevo comprador en los próximos meses, Telefónica ha puesto en marcha la salida a bolsa de parte de su filial británica. "Si alguna empresa viene y ofrece lo mismo que el grupo de origen chino por O2 Reino Unido, Telefónica se lo vendería sin problema pero, de momento, la opción más viable es la salida a bolsa", explican a este diario fuentes conocedoras de la operación.
El primer paso dado por la multinacional ha sido el nombramiento de Mark Evans como consejero delegado de Telefónica Reino Unido. Evans, que actualmente ocupa el cargo de director financiero, tomará las riendas de la filial el 1 de agosto y su mandato es preparar la OPV. El directivo es de la máxima confianza de Pallete, según explican desde Telefónica, que han señalado como un gran activo para liderar la operación su perfil financiero y comercial.
El segundo paso ha sido la contratación de Morgan Stanley y de UBS para que realicen la valoración de O2 Reino Unido, se reúnan con posibles inversores y asesoren el proceso. También han contratado a dos despachos de abogados en Inglaterra para que participen en la operación: Ashurt y Herbert Smith. Los asesores de la salida a bolsa de Telxius son JP Morgan y Goldman Sachs y son los que a finales de junio, ante la incertidumbre que sacudía a los mercados, animaron a Pallete a congelar la salida a bolsa de la filial de infraestructuras (torres de telefonía) hasta que no hubiera un escenario mínimo de estabilidad para atraer inversores.
Y es que tras el Brexit, las acciones de Cellnex, la compañía comparable de Telxius en el mercado español, se desplomaron más de un 9 por ciento hasta mínimos de 12,88 euros por acción. Desde entonces, los títulos de la compañía de torres se han disparado un 21,8 por ciento hasta los 15,63 euros con los que cerró el viernes. Todavía está lejos de los máximos anuales pero acumula casi dos semanas de alzas.
Objetivo: reducir deuda
La puesta valor de la filial británica de O2 viene a lanzar el mensaje a los inversores y casas de calificación de que la reducción de la deuda, cifrada en 50.213 millones de euros, es la gran preocupación de la multinacional. "Aunque Telefónica no tiene la necesidad de reducir deuda, las agencias de rating se lo están pidiendo y la compañía se ha comprometido a cerrar el año con un ratio deuda/oibda mucho menor", explican fuentes del mercado. Ni Moody?s, ni S&P, ni Fitch han otorgado la máxima calificación a la deuda del Grupo Telefónica.
No en vano, la teleco española ha publicado un objetivo de deuda/oibda (similar al ebitda) de 2,35 veces, un nivel que tiene complicado alcanzar si no vende activos o logra fondos en el mercado. Telefónica cerró el primer trimestre del año con una deuda 3,02 veces oibda y, en la presentación de resultados de marzo, reconoció que con la venta de O2 al grupo chino la reduciría a 2,54 veces (Bruselas vetó la operación en mayo).
Telefónica, que tiene más opciones sobre la mesa para recortar su pasivo, ha aumentado su deuda en 292 millones en el primer trimestre por la retribución al accionista, el pago de compromisos de origen laboral y las inversiones financieras. Entre los factores que reducen la deuda destaca el menor valor en euros de la deuda en divisas.