Francia se enfrenta al fantasma de quedarse sin gasolina: una huelga paraliza las refinerías

Una huelga con piquetes que impiden el movimiento de camiones cisterna en los principales depósitos estratégicos de combustible de Francia, que podría agravarse en las próximas horas con otro paro en la empresa de ferrocarriles SNCF, amenaza con detener buena parte de la actividad en Francia.

La oleada de paros está liderada por el poderoso sindicato CGT, que cuenta con unos 700.000 afiliados, y tiene como objetivo poner de rodillas no sólo al sector petrolífero sino también tumbar la reforma laboral emprendida por el gobierno socialista de Manuel (y aprobada finalmente por Decreto ante la falta de apoyo parlamentario), que ha sido objeto de numerosas protestas en las últimas semanas y que es el principal germen del movimiento de indignados NuitDebout.

Conforme a los datos publicados por el diario Le Figaro, la totalidad de las 8 refinerías con que cuenta Francia (tres en el océano Atlántico, y otras tres en el mar Mediterráneo) están teniendo problemas para sacar gasolina o gasóleo hacia los puntos de distribución y venta.

Para complicar aún más las cosas, el sincidato CGT ha conseguido bloquear cuatro de los depósitos estratégicos de carburante diseñados para garantizar unos dos meses de suministro, y los trabajadores de una refinería en Le Havre que procesa el 40% del crudo que entra en el país han votado para ir a la huelga desde hoy.

Un 30% de estaciones sin combustible

Los mensajes del gobierno socialista mezclan de forma paradójica la idea de que la huelga es un ataque a los ciudadanos de Francia con el aviso a los consumidores para que se tranquilicen ya que no habrá una ruptura en la cadena de suministro.

Pese a ello, el número de estaciones que tienen ya sus depósitos de gasolina, gasóleo o ambos vacíos asciende ya a 3.572 de las cerca de 12.000 que existen en Francia, conforme a la aplicación Essence. Puesto que el lunes el ejecutivo socialista aseguraba que los problemas de abastecimiento afectaban sólo al 20% de las gasolineras, el número de expediciones sin carburante ascendería ya a un 30%.

Ante la situación, numerosas organizaciones de transporte por carretera están ya sugiriendo a sus miembros que si deben cruzar territorio francés, llenen el depósito de sus camiones antes de pasar la frontera.

La empresa Total, que paga la mayor parte del impuesto de sociedades fuera de Francia, ha reaccionado por su parte de forma furibunda a la huelga amenazando con "revisar seriamente" sus proyectos de inversión en el país.