Empresas y finanzas

Sniace sube un 155% en su retorno al parqué tras dos años


    Javier Mesones

    Superado el concurso, el grupo parte con una deuda de 90 millones y prevé reactivar la fábrica de Torrelavega en junio

    Sniace regresó ayer al parqué tras un año y medio suspendida de cotización con un alza del 155,1 por ciento, hasta 0,5 euros. La compañía elevó así su capitalización a 39 millones. En sus mejores años, superó los 400 millones. Su retorno al mercado es el primer paso dentro del plan de viabilidad, tras haber superado el concurso de acreedores. Ahora, la empresa que preside Blas Mezquita prevé ampliar capital por hasta 15,6 millones, con el objetivo de reanudar en junio la actividad en su fábrica de Torrelavega, en Cantabria.

    La nueva Sniace parte con una deuda de entre 85 y 90 millones de euros, frente a los 118 millones previos al concurso. Este pasivo no tendrá intereses, después de llegar a un acuerdo con sus acreedores, entre los que destacan entidades financieras como Santander, BBVA, Sabadell o Liberbank y empresas como la ingeniería asturiana TSK, que al mismo tiempo es uno de los principales accionistas, o GDF. La mayoría ha optado por una quita del 50 por ciento. Otros han escogido créditos participativos o un descuento del 90 por ciento y recibir un pago dentro de tres años. La empresa ultima con las Administraciones Públicas la firma de un convenio singular. Asimismo, Sniace ultima un acuerdo con el comité de empresa, por el que la plantilla se situará en 326 personas, frente a las 555 que tenía hace dos años.

    La ampliación de capital preferente no está garantizada. Por el momento ?no se ha hecho una prospección? en el mercado, explica Mezquita, pero la empresa sí tiene el compromiso de los principales accionistas -Félix Revuelta, San Jose 8 y TSK-, que suman en torno al 30 por ciento del capital. De los 15,6 millones, entre 8 y 9 se invertirán en la fábrica de fibras.

    La dirección de Sniace, por el momento, no ha estudiado otras vías de financiación. Si no se cubriera la ampliación, sí contempla la venta de terrenos o del 40 por ciento de Lignotech por 1,8 millones a la noruega Borregaard, con la que selló una joint venture en los años 70. El grupo no descarta explorar opciones para firmar alianzas similares.

    La nueva Sniace centrará su actividad en la producción de celulosa dissolving y fibra, limitando a la mínima expresión la facturación derivada de la generación eléctrica. Hace dos años, este segmento representaba más de la mitad de sus ingresos y desencadenó la quiebra del grupo como consecuencia de las reformas energéticas.

    La empresa considera que la reanudación de la actividad se produce ?en un momento bueno?, en el que las materias primas ?llevan ocho o nueve meses subiendo?. En sus proyecciones, a nueve años vista, el grupo estima que en 2016 perderá 9,4 millones y que ya en 2017 podrá reportar un beneficio de 10,8 millones. La política de dividendos se estudiará en su momento.