Empresas y finanzas

Irán abre la puerta a empresarios de EEUU tras el acuerdo nuclear


    EFE

    El presidente iraní, Hasan Rohaní, abrió este domingo la puerta a los empresarios estadounidenses que quieran invertir en Irán, para los que el único obstáculo serán las leyes de su propio país una vez que ya se eliminaron las sanciones internacionales sobre el país asiático.

    "Si los estadounidenses quieren invertir en Irán, no hay obstáculos" dijo el presidente en un encuentro con la prensa en el que trató la puesta en marcha anoche del denominado Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA en inglés).

    El mandatario insistió en que a partir de ahora son los EEUU los que deben eliminar sus propias trabas para poder tener lazos comerciales con Irán, y recordó que ya se han tomado pasos en ese sentido en algunos campos.

    "En el campo de la venta de aviones de pasajeros, ellos proporcionaron ya las facilidades y eliminaron las trabas", dijo en referencia a la autorización que ayer mismo otorgó el presidente de EEUU, Barack Obama, al secretario de Estado, John Kerry, para dar permiso a las empresas de su país para que puedan vender y enviar material aéreo a Irán.

    Además, también señaló que Washington "eliminó los impedimentos" para la importación de algunos productos iraníes coma alfombras, azafrán y pistachos.

    "Para los pueblos de ambos países será mejor que EEUU elimine las trabas económicas que tiene respecto a Irán. Sería un favor al pueblo de EEUU y al de Irán".

    Anoche entró en vigor el acuerdo anunciado el pasado mes de julio por Irán y el Grupo 5+1 (EEUU, Francia, Rusia, Reino Unido, China y Alemania) diseñado para evitar que Irán pueda desarrollar armas atómicas al tiempo que le permite mantener un pequeño programa nuclear y elimina las sanciones contra su economía.

    Irán y EEUU rompieron sus relaciones diplomáticas y prácticamente todo intercambio comercial tras la Revolución Islámica en 1979.

    Sin embargo, el acercamiento durante las negociaciones para el acuerdo nuclear, en la primera ocasión en 36 años en las que diplomáticos de ambas partes estuvieron frente a frente públicamente, ha abierto un proceso de deshielo sin precedentes.

    Precisamente esta semana del fin de las sanciones ambos países lograron resolver de forma rápida y sin problemas la captura de dos buques de guerra estadounidenses que entraron en aguas iraníes y negociaron un importante intercambio de prisioneros que constituía una espina en la relación bilateral.