El enfoque económico de Yellen, a prueba con la decisión sobre tipos
WASHINGTON (Reuters) - La presidenta de la Reserva Federal de Estados Unidos, Janet Yellen, ha dejado claro que preferiría aplazar demasiado una subida de tipos de interés a actuar antes de tiempo y arriesgarse a poner piedras a una recuperación económica tibia, una visión que afrontará el jueves su prueba más importante hasta la fecha.
Habiendo sopesado el avance constante de la economía hacia el pleno empleo frente al contexto de una inflación débil, un crecimiento salarial flojo y turbulencias en el extranjero, la Fed dará a conocer su última decisión sobre tipos de interés al final de una reunión de dos días.
Un alza de tipos sería la primera en Estados Unidos en casi una década.
Los observadores de la Fed, sin embargo, creen que el resultado será el equivalente de un "cara o cruz", donde el deseo declarado de Yellen por ver que los trabajadores obtengan más beneficios de la recuperación se enfrentará a unas subidas débiles de los precios y una serie de riesgos globales.
"La clave es lo que piensa Yellen y mi hipótesis es que ella va a querer esperar", dijo Mark Zandi, economista jefe de Moody's Analytics. "Si te pones en su lugar, no quisieras errar por actuar demasiado pronto".
Ese es un error que el Banco Central Europeo cometió dos veces en 2011.
Además de la publicación de la declaración de política monetaria a las 14.00 hora local (1800 GMT), la Fed también emitirá una nueva serie de proyecciones económicas que permitirán conocer el ritmo previsto de alzas posteriores en los tipos de interés y otros asuntos económicos clave.
Yellen ofrecerá una conferencia de prensa poco después.
Los inversores, economistas y analistas están ampliamente divididos sobre si la Fed confiará más en el crecimiento estable de Estados Unidos y subirá los tipos de interés, o si cederá a las preocupaciones por la salud de la economía global y retrasará el "despegue" hasta octubre o diciembre.
"Un buen argumento para elevar los tipo de interés ahora es que todo el mundo sabe que un aumento es inevitable y la especulación sobre el momento está creando mucha volatilidad. Una forma de reducir eso es terminar el juego de adivinanzas", dijo Ann Owen, profesora de economía en el Hamilton College en Clinton, Nueva York, y ex economista de la Fed.
Pero a un banco central que gusta descansar sus decisiones en el comportamiento de los datos macroeconómicos, los números más recientes le han dado pocas señales de la conveniencia de alejarse de las políticas en que se embarcó tras la crisis financiera del 2007-2009.