Empresas y finanzas
Deportes de aventura para liberar adrenalina en vacaciones
- Asturias es el destino perfecto para espeleólogos: tiene más de 500 cuevas
Sérvula Bueno
El deporte puede ser una buena vía de escape para liberar la mente y mantenerse bien físicamente. Sin embargo, conviene ejercitarse de manera responsable. Estirar antes y después de realizar ejercicio, hidratarse constantemente o usar un calzado adecuado son sólo algunas recomendaciones para evitar lesiones y desvanecimientos.
Todos estos consejos se acentúan cuando se une la pasión por el deporte con la naturaleza. De hecho, las actividades llevadas a cabo en la montaña requieren mucha más concentración que el ejercicio convencional, sobre todo si no se cuenta con el adecuado conocimiento del entorno regional por el que se transita o de la propia actividad que se desempeña.
El ciclismo de montaña -también conocido como mountain bike-es una de las modalidades de deportes extremos más exigentes que existen. Consiste en recorrer grandes distancias sobre una bicicleta especializada y atravesando un terreno abrupto y accidentado. Aunque esta práctica -nacida en Estados Unidos en la década de los setenta- requiere un cierto nivel de resistencia, es apta para casi todos los públicos, aunque el límite de edad depende del sendero elegido. La página web www.mountainbike.es ofrece multitud de rutas para todo el que quiera lanzarse y probar esta modalidad. Desde el tranquilo sendero de la Vía Verde de la Sierra, en Cádiz, hasta los caminos empedrados del Valle de la Sangre, en Soria, hay opciones para todos los gustos.
Sin embargo, la montaña brinda la posibilidad de realizar otras muchas actividades. Una de ellas es el senderismo, también conocido como trekking. Un hobby con el que se fortalece el cuerpo -ya que combina ejercicio aeróbico con tonificación muscular- y que, en los últimos años, está ganando muchos adeptos. Aunque estos calurosos días de verano no invitan a practicarlo, la llegada del otoño puede ser la ocasión idónea para lanzarse a recorrer el monte. Las últimas investigaciones en esta materia apuntan que realizar senderismo disminuye la ansiedad y mejora el estado de ánimo y la memoria. Además, es un ejercicio perfecto para hacerlo acompañado de los peques de la casa, ya que, al estar en contacto con la naturaleza, aprenderán a valorar y cuidar el medio ambiente. Entre las rutas de senderismo más aclamadas destaca la del Río Borosa, en el Parque Natural de la Sierra de Cazorla, en Jaén; o la ruta Peña Trevinca, en el Parque Natural del Lago de Sanabria, en Zamora.
Riesgo y diversión, de la mano
Para los más aventureros, el barranquismo puede ser su mejor aliado estos días estivales, ya que consiste en recorrer los cañones de un río. Los tramos son muy variados, por lo que algunas zonas se atraviesan escalando e, incluso, nadando. Aunque se requiere una cierta preparación, las imágenes y sensaciones que la naturaleza ofrece a cambio difícilmente se podrán sentir en otros deportes. Para los que se inicien en esta práctica, se recomienda ir acompañado de un experto ya que, en algunas ocasiones, la experiencia es un plus sorteando los obstáculos del abrupto camino. El equipamiento adecuado es otro requisito imprescindible. No puede faltar desde el traje de neopreno o los escarpines, hasta cuerdas y linternas. Quien quiera probar este deporte de aventura puede acercarse a la Serranía de Cuenca, en la que empresas como Júcar Aventura (www.jucaraventura.es) ofrecen practicar junto a un grupo de especialistas barranquismo en el Cañón del Júcar, o Mallorca, que cuenta sólo en la Sierra de Tramontana con más de 10 torrentes. Empresas como Més Aventura o Escull Aventura tienen recorridos por toda la isla balear adaptados a todos los niveles.
Otra opción para los amantes de la adrenalina es el rafting, un deporte de aguas bravas muy extendido en nuestro territorio. En él, el trabajo en equipo es fundamental, ya que consiste en descender los rápidos de un río en un bote de lona, por lo que cualquier movimiento brusco puede desestabilizar al grupo. Al igual que en el barranquismo, el equipamiento es un aspecto fundamental. Normalmente, la empresa organizadora proporciona el casco, el traje de neopreno, el chaleco salvavidas, los escarpines y los remos. La compañía Roc Roi, especialista en deportes de aventura, ofrece descensos en rafting en el Pirineo catalán de hasta 52 kilómetros, una elección perfecta para los más avanzados. Por su parte, quien quiera iniciarse tiene la opción de optar por tramos más cortos.
Aunque en España la espeleología es una actividad relativamente desconocida, ha ganado muchos adeptos entre los aficionados a los deportes de aventura. Su práctica requiere tener conocimiento de ciertas técnicas deportivas. Esto hace que, a pesar de ser una ciencia, se tienda a confundir con un deporte. El privilegio de explorar las entrañas de la tierra junto a la sensación de aventura que presenta son dos de los muchos atractivos de esta práctica. Quien quiera animarse a descubrir estos entornos profundos puede acercarse a Asturias, donde están catalogadas más de 500 cavidades diferentes. La empresa Aventuras en Asturias (www.aventurasenasturias.com) propone expediciones orientadas por sus guías especializados a las cuevas de Cangas de Onís, Llanes o Panes. Más hacia el sur, la compañía andaluza Aljibe Actividades en la Naturaleza (www.aljibe.com) ofrece recorrer en grupo y con monitores titulados la travesía del Sistema Hundidero-Gato, en el Parque Natural Sierra de Grazalema.
Un territorio nacional abrupto
España es uno de los países más montañosos del continente europeo. Por este motivo, la escalada puede practicarse en un sinfín de rincones. Aunque parezca una actividad arriesgada, en sólo unas sesiones se alcanza el nivel adecuado para ascender las cimas más altas, eso sí, empleando siempre medios de aseguramiento. Lugares como el Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares, en Madrid, o el Circo de Gredos, en Ávila, son algunos de los enclaves montañosos con mayor asistencia de aficionados a este deporte. Sin embargo, y a pesar de las medidas de seguridad, hay muchas personas a las que la escalada les sigue despertando bastante miedo. Justamente pensado para ellas, se han desarrollado los recorridos de vía ferrata. Se trata de itinerarios equipados con sencillas clavijas o con sofisticados puentes colgantes y tirolinas. En todo momento, un cable de seguridad va instalado a lo largo del trayecto para proteger al deportista en caso de caída.
Por último, merece mención especial una de las actividades más practicadas durante la época estival. Hablamos del parapente, que se lleva a cabo, principalmente, en primavera y verano porque la climatología adecuada es una condición imprescindible para poder desempeñarlo. La forma más segura de iniciarse en este deporte es hacerlo acompañado de un experto piloto. La empresa Parapente Madrid, así como la escuela de vuelo, Parapente Pirineos, ofrecen cursos para aprender esta práctica tan atrevida.