Las demandas colectivas acechan a Abengoa en EEUU por la ampliación

La debacle de los títulos de Abengoa en bolsa tras el anuncio de una ampliación de capital de 650 millones -ha perdido en el último mes un 67,27% de su valor- puede enfrentar al grupo con varias demandas colectivas en Estados Unidos.

Cuna de los litigios por excelencia, los voraces bufetes de abogados diseccionan con detenimiento cualquier traspiés bursátil de las compañías que cotizan en bolsa en busca de posibles demandas colectivas que pongan contra las cuerdas a dicha empresa en cuestión. En esta ocasión la debacle de los títulos de Abengoa se han convertido en el cebo perfecto para esta clase de procesos legales.

Al menos dos despachos de abogados estadounidenses, Block Leviton, en Bostón, y Levi & Korsinsky, en Nueva York, han comenzado a contactar con accionistas de Abengoa, con la esperanza de lograr un número considerable de inversores dispuestos a demandar a la compañía española, tras el desplome de sus acciones y la contrariedad en los mensajes lanzados por sus directivos desde el pasado 31 de julio.

Según rezan los documentos publicados por ambos bufetes, la base para esta demanda estaría en la ampliación de capital anunciada el pasado 3 de agosto por valor de 650 millones de euros. Estos tiburones estiman que las "contradicciones" de Abengoa y su cuerpo directivo, son litigiables y responsables de la caída en bolsa de la compañía.

Bajo estas circunstancias, ambos despachos han comenzado la caza y captura de inversores, tanto individuales como institucionales, que hayan invertido en Abengoa antes del 2 de agosto de 2015, con la intención de probar que "tanto los directivos actuales como sus predecesores han tergiversado la posición de liquidez en las cuentas de la compañía".

Al mismo tiempo, los bonos de deuda de Abengoa han colapsado durante cinco jornadas consecutivas y, en estos momentos, sus bonos con vencimiento en 2020, se cambian a 45 centavos sobre el dólar, un nivel que algunos equiparan al de una próxima bancarrota y asemejan al escándalo de Solyndra, si tenemos en cuenta que la compañía española ha recibido subsidios por parte de los contribuyentes de EEUU por valor de 230 millones de dólares (unos 206 millones de euros).

Abengoa anunciaba el pasado 3 de agosto que lanzará una ampliación de capital por un importe de 650 millones de euros, que tendrá que ser ratificada en una junta de accionistas extraordinaria, y que ya cuenta con el apoyo del principal accionista del grupo, Inversión Corporativa. Los fondos se dedicarán a reducir deuda -por un importe de 300 millones de euros- y a reforzar los fondos propios. Asimismo, la empresa ha puesto en marcha un nuevo plan de desinversiones por un total de 500 millones de euros, que incluyen los 400 millones ya anunciados el pasado viernes, así como desinversiones adicionales de activos de bioenergía.