Empresas y finanzas

Industria promueve el autoconsumo en las islas y lo frena en la península


    Rubén Esteller

    El Gobierno quiere que se desarrolle cuando sea eficiente para el sistema, no para un consumidorImpone un peaje de acceso para sufragar las redes y un cargo por los costes generales

    El Ministerio de Industria ha enviado ya a la Comisión Nacional de Mercados y Competencia el proyecto de Real decreto que regula el autoconsumo y que, según indica, "permitirá la implantación de este tipo de instalaciones cuando resulte eficiente para el sistema eléctrico en su conjunto, no individualmente para un consumidor", lo que en pocas palabras viene a dejar claro que los consumidores domésticos deberán esperar para su desarrollo, que únicamente será verdaderamente viable en las islas Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla.

    En el proyecto, el Gobierno diferencia entre un peaje para sufragar las redes, que el autoconsumidor costeará cuando esté vertiendo o recibiendo electricidad a la red, y los cargos del sistema, que deberán pagarse siempre, y que cubren desde las primas a las renovables hasta las anualidades del déficit de tarifa.

    Es decir, de este modo, la energía autoconsumida no tendrá que pagar por este concepto ni tampoco los impuestos correspondientes. La única forma de evitar este pago será tener una instalación completamente aislada del sistema.

    En la normativa, desvelada ayer por elEconomista.es, se regulan tres tipos de modalidades de autoconsumo. Por un lado, el suministro para un usuario con una potencia contratada no superior a los 100 KW, que tenga una instalación cuya suma sea igual o inferior a dicha potencia. Esta modalidad servirá para aquellos usuarios que pretenden conectarse con placas o minieólicas de muy pequeño tamaño y no generará energía excedentaria. Esta modalidad no requerirá, por lo tanto, la habilitación para vender energía eléctrica y su régimen administrativo será más sencillo.

    Por otro lado, el Gobierno introduce la modalidad de producción con autoconsumo. A este caso podrán acogerse las instalaciones de cualquier tecnología cuya suma de las potencias instaladas no sea superior a 100 KW o las instalaciones de cogeneración cuya potencia instalada sea superior a 100 KW.

    Y, por último, se incluye la modalidad de producción de un consumidor conectado a través de una línea directa con una instalación de producción. Se trata, de este modo, de dos sujetos, el consumidor y el productor unidos mediante líneas directas. Hasta este momento, las instalaciones no inscritas como productoras no estaban amparadas en la normativa sectorial y por lo tanto no tenían un régimen económico claro.

    Al consumidor, con independencia de la modalidad de autoconsumo, se le aplicará el término fijo del peaje de acceso por la potencia contratada y el término variable del peaje de acceso por la energía consumida.

    La normativa permite que la titularidad de las instalaciones de consumo y generación sea distinta, lo que abre la puerta a que las empresas puedan ser propietarias de este tipo de instalaciones y no los clientes que las utilicen.

    El proyecto además explica que el consumidor debe ser único para mejorar la eficiencia y se flexibiliza la obligación de instalar dos equipos de medida en las pequeñas instalaciones.

    Beneficios para las Islas

    El Ministerio además beneficiará la instalación de este tipo de autoconsumos en las islas y ciudadaes autónomas. Para ello establece una reducción del peaje de respaldo hasta el año 2019 en los sistemas eléctricos de los territorios no peninsulares para fomentar la participación de las renovables, la cogeneración de alta eficiencia y la dismi- nución de los costes de generación.

    La reducción será mayor cuanto mayor sea la diferencia entre el precio del despacho de costes variables en un sistema aislado y el precio del mercado peninsular. A modo de ejemplo, la instalación de 10 MW de potencia fotovoltaica con unas horas medias equivalentes de 1.600 pueden suponer un ahorro para el sistema de hasta 30 euros/ MWh en función de la tarifa en Baleares y más de 100 euros/MWh en Canarias.

    Esta regulación deja fuera a los grupos de generación de emergencia utilizados exclusivamente en caso de una interrupción del suministro.

    El Gobierno explica, además, que regula la definición de instalación conectada a la red para evitar el fraude de ley que se produciría en el caso de que las instalaciones se conectaran y desconectaran alternativamente con la única finalidad de evadir el régimen económico de este tipo de instalaciones.

    La normativa deberá satisfacer los peajes de acceso a las redes de transporte y distribución aplicados a los productores de energía eléctrica y se deberá formalizar un contrato de acceso para los servicios auxiliares de producción (para los pequeños productores de menos de 100 KW de potencia instalada se formalizará un contrato de acceso conjunto para los servicios de auxiliares de producción y para el consumo asociado).

    El presidente de Unef, Jorge Barredo, indicó ayer en un comunicado que "penalizar con un peaje extra al consumidor responsable que ahorra con un sistema de autoconsumo es como imponer un impuesto por estar ahorrando a quien decida abanicarse en vez de encender el aire acondicionado todo el día". La patronal asegura que el Gobierno está obstaculizando el desarrollo de este negocio.

    El decreto reconoce la exención de los cargos para la recuperación de coste del sistema y del cargo por autoconsumo para las instalaciones de cogeneración y les exige que hayan implantando un sistema de ahorro y eficiencia, además de una serie de requisitos técnicos.