Ana Botín cobra el doble que su padre como presidente del Santander
- El banco limita las subidas de los salarios fijos a la cúpula para el año 2016 al 3%
La presidenta de Banco Santander, Ana Botín, cobra el doble que su padre Emilio, que estuvo al frente del grupo hasta septiembre. La nueva máxima responsable percibirá este año un salario fijo de 2,5 millones de euros, lo que prácticamente duplica la retribución que percibía su antecesor. Y en su conjunto el año pasado, en el que incluía la remuneración variable y dietas, la cuantía asciende a 6,8 millones, lo que supone un 126% más que su progenitor.
En este global de 2014 no se incluyen los fondos destinados a su plan de jubilación, que suman 2,14 millones, y tiene en cuenta el salario percibido como consejera delegada de la filial del Reino Unido durante nueve meses y como presidenta del Santander los restantes cuatro. En concreto, el sueldo fijo de Ana Botín alcanzó los 1,7 millones (1,4 millones por la franquicia británica y 0,83 millones por el grupo), mientras que el variable ascendió a 4,7 millones, de los que 2,3 millones correspondían a las mayores atribuciones a partir de septiembre.
El perfil de la nueva presidenta es diferente al de su padre. Éste nunca percibió una gran retribución en comparación con el sector; y su número dos, Alfredo Sáenz, siempre cobró el doble o más.
Según los datos publicados este miércoles, la variable de Ana Botín y el resto de ejecutivos está condicionada al cumplimiento de determinados objetivos como hasta ahora. En cuanto a la fija, el consejo ha decidido congelarla para 2015 y limitar la subida a un 3% para 2016. En este ejercicio, el banco tiene previsto acotar a 6 millones el salario total que podrán asumir cada uno de los consejeros sin tener en cuenta las funciones ejecutivas.
Toda esta política permite al nuevo consejero delegado, José Antonio Álvarez, percibir 2 millones de salario fijo, misma cantidad que su ex 'número dos', Javier Marín, que abandonó su cargo este mes de enero con motivo de la reestructuración de la cúpula. La retribución total de Marín, incluyendo la variable, se elevó a 5,3 millones, lo que significa un aumento del 12,7% más que en 2013.
Blindaje de Echenique
Con los movimientos en la estructura organizativa, Rodrigo Echenique salió reforzado. Por ello, percibirá 1,5 millones de euros por su labor y cuenta con un blindaje hasta 2018. Si se le despide antes, tendrá derecho a recibir 3 millones de euros, según los documentos que serán sometidos a la próxima junta de accionistas, que se celebrará el 27 de marzo.
Echenique, además, acumula una pensión de 15 millones, que supera los poco más de 13 millones del fondo de jubilación de Juan Rodríguez Inciarte. El hermano de éste, Matías, tendrá derecho a percibir en el momento de su jubilación unos 47,2 millones.
El fondo de Emilio Botín en el momento de su fallecimiento sobrepasaba los 26 millones, a los que tiene derecho su viuda.
La nueva presidenta también ha modificado su sistema de prejubilación. A partir de ahora, en tal caso, su asignación será equivalente a la suma de su retribución fija y el 30% de la media de las tres últimas tres variables. La cuantía bajará un 20% si deja su puesto de manera voluntaria antes de los 60 años.