Banco Santander hace presidenta a Ana Botín, que iba a acceder al cargo en 2015

La sucesión en la presidencia del Santander se produjo ayer de manera acelerada tras el fallecimiento inesperado de Emilio Botín. Pero el relevo ya estaba preparado y el consejo actuó según el plan diseñado por el banquero cántabro. Emilio Botín ya había tomado la decisión meses atrás de preparar una transición ordenada en el banco. Adiós a Emilio Botín, el último banquero de raza.

Algo que ya sucedió en su caso, cuando su padre, a la edad de 86 años, decidió pasarle el testigo de la presidencia.

Emilio Botín tenía planeado anunciar el relevo este mismo año. Eso no quiere decir que su ciclo se fuera a cerrar en las próximas semanas, sino que anunciaría públicamente, al más puro estilo anglosajón, su marcha, su sucesor y su fecha de salida, que se produciría el año próximo. Un plan truncado por una repentina e inesperada muerte, ya que Botín, practicante del ejercicio físico, gozaba de un excelente estado de salud para una persona de su edad.

Tras conocerse el fallecimiento a primera hora de la mañana, el mecanismo previsto en el banco que presidió durante los últimos 28 años se puso en marcha. Los estatutos del Santander establecen el guión a seguir en caso de ausencia del presidente. Y éste se siguió ayer a la perfección. A primera hora de la mañana, se reunió la Comisión de Nombramientos, que estuvo presidida por el vicepresidente Fernando Asúa, un hombre de confianza del banquero desaparecido. Esta comisión propuso al consejo de administración la elección de la hija de Emilio Botín como nueva presidente, atendiendo así a sus deseos. El órgano rector ratificó el nombramiento ya por la tarde por unanimidad.

Primeros mensajes

El comunicado del banco, tras la elección, fue muy breve. Apenas cuatro párrafos para condensar el relevo en el puesto de más alta responsabilidad. En el mismo, Ana Patricia hacia sus primeras declaraciones: "En estos momentos tan difíciles para mí y mi familia, agradezco la confianza del consejo de administración y asumo con total compromiso mis nuevas responsabilidades".

Las siguientes palabras son todo un mensaje a aquellos que tengan la tentación de poner en duda su valía para llevar las riendas del primer banco de la zona euro: "Durante años he trabajado en el grupo Santander en distintos países y responsabilidades y he podido comprobar la enorme calidad y dedicación de todos nuestros equipos".

Y es que, efectivamente, tal y como pasó con su padre, ella se formó desde muy joven en el grupo y fuera de él, asumiendo distintas responsabilidades y áreas, con lo que acumula más experiencia que otros homólogos en el sector.

El último de sus cargos, hasta ayer, era el de máximo responsable de la filial británica del Santander, una de las más preciadas joyas del grupo y que tras algunos años sufriendo la recesión de los mercados maduros había conquistado el honor de aportar al grupo un 20 por ciento de los beneficios, el mayor de todos los países, incluido España y Brasil.

Línea continuista

Ana Patricia Botín también manifestó que "seguiremos trabajando con total determinación para seguir construyendo un Banco Santander cada día mejor para nuestros clientes, empleados y accionistas", garantizando así una línea continuista en un grupo que ha basado su estrategia en amplios y experimentados equipos.

La sucesión en el Santander nunca se abordó de forma abierta y en las ocasiones en las que Emilio Botín fue interrogado siempre aludía al respaldo que tenía dentro del banco y a su extraordinario estado de salud para evitar responder.

El vicepresidente primero de la entidad y presidente de la comisión de nombramientos y retribuciones, Fernando de Asúa, expresó en la misma nota "profundo sentimiento de pesar" por el fallecimiento de Emilio Botín. "Ha sido importantísimo para el banco, al protagonizar una extraordinaria transformación del mismo, convirtiéndolo en el primero de la eurozona y en uno de los más importantes del mundo, y para España", aseguró, en palabras respaldadas por todos los actuales consejeros.

El cuerpo fue trasladado a a Santander, donde se celebrará el entierro. Está previsto para el día de hoy, en el Panteón familiar en Puente San Miguel, en un acto que tendrá lugar en la intimidad a petición de la familia. El sábado, día 13, tendrá lugar un funeral en la catedral de Santander.

Ana Patricia Botín nació en 1960 en Santander y es licenciada en Ciencias Económicas. Fue nombrada por primera vez consejera del Banco el 4 de febrero de 1989 y reelegida en las juntas generales de 1991, 1994, 1997, 2000, 2003, 2006 y 2014.

Ana Botín, hasta ahora responsable de la filial británica del grupo, ha dejado el testigo al vicepresidente de la misma, Nathan Bostock, hasta la próxima semana, cuando se celebrará una reunión para adoptar el relevo en esta división.

Algunas fuentes no descartan que se produzcan más cambios en la cúpula, tanto en las distintas divisiones del banco español como en la propia matriz. En el sector se especula con la posibilidad que haya una renovación en el consejo.