El lujo se beneficia de la inflación: Gucci y las marcas del grupo LVMH disparan sus ingresos
- Tiene una demanda relativamente inelástica
- Las ventas de Gucci aumentaron un 32% en el cuarto trimestre de 2021
elEconomista.es
El empeoramiento de la inflación está llevando a muchas compañías a elevar el precio de sus productos, lo que supone una amenaza en potencia para el consumo de los mismos. Heineken es la última de esa larga lista que ha anunciado que subirá los precios de su cerveza en cantidades "valientes". Una situación que afecta negativamente a todos los sectores, menos al del lujo. La diferencia entre este sector y el del consumo de masas reside en su demanda relativamente inelástica.
El incremento de los precios y la inseguridad económica que lo acompaña no llega a los consumidores de lujo, quienes si pueden permitirse un bolso de 10.000 euros, pueden pagar una tasa de inflación adicional de 1.000 euros. Las firmas de lujo han aumentado de manera constante los precios de sus bolsos a lo largo de la pandemia y esto no ha supuesto un revulsivo para los consumidores con ingresos altos del mercado estadounidense y del chino, como han constatado el Grupo Kering y LVMH.
La casa italiana Gucci, parte del Grupo Kering, registró un aumento del 32% en las ventas del cuarto trimestre de 2021. Este crecimiento es el resultado de un cóctel que combina contar con "embajadores" de la talla de Harry Styles, Jared Leto o Dakota Johnson; la publicidad que ha acompañado el estreno de La Casa Gucci de Ridley Scott; y el poder de los precios.
En total, el Grupo Kering reportó unos ingresos de 17.600 millones de euros en 2021, un 35% más que el año anterior y un 13% superior a los niveles de 2019. Por su parte, su máximo competidor y rey indiscutible del lujo, LVMH, registró un beneficio récord de 12.000 millones de euros en 2021, impulsado por el auge de la demanda en EEUU y China.
Un comportamiento que no se da sólo en las marcas que engloban estos dos grupos. La maison Chanel incrementó el precio de su emblemático bolso 2.55 de tamaño mediano hasta en tres ocasiones, cada una de ellas supuso un aumento de 1.000 dólares. Desde noviembre de 2019, el precio del bolso de Chanel ha experimentado una subida del 60%, según Jefferies. Pese a las constantes subidas de precios, la escasez de 2.55 en el mercado chino es tal que los consumidores solo pueden comprar uno al año.
Las marcas de consumo de masas son la otra cara de la moda. El aumento de los precios derivado de la inflación está afectando con fuerza a su rentabilidad. El gigante suizo de la alimentación Nestlé ha advertido que el aumentó en el precio de las materias primas y los costes de transporte podrían hacer mella en su rentabilidad por segundo año consecutivo. Unilever, por su parte, espera que el coste de la inflación se coma su margen operativo subyacente, del orden de 140 a 240 puntos básicos este año, según publica Fortune.
Hermès no cosecha tan buenos resultados
A diferencia de Gucci, la firma francesa no cosechó unos buenos resultados en el último trimestre de 2021. Según el informe presentado esta semana, las ventas de la división de marroquinería de Hermès cayeron un 5,4% debido a las limitaciones de capacidad. En total, sus ventas ascendieron a 2.380 millones de euros, por debajo de la previsión de consenso de 2.530 millones de euros.
La firma francesa se vio obligada a aumentar sus precios para hacer frente al incremento de los costes de producción y las fluctuaciones monetarias. Hermés aumentó los precios globales en un 3,5% de media en 2021, por encima de la tasa habitual del 1,5%, aunque muy por debajo de los aumentos de precios más agresivos de los competidores, como Louis Vuitton, que subió los precios un promedio del 7% en todo el mundo.
Axel Dumas, CEO de Hermès, ha asegurado en declaraciones a la CNBC que no existe ningún tipo de estrategia para impulsar el crecimiento mediante el incremento de precios.
La publicación de estos resultados alejados de las previsiones provocaron que el precio de las acciones de Hermès cayera un 7%, registrando su peor día desde septiembre de 2016 y su precio más bajo en más de ocho meses.
El lujo apuesta por el metaverso
El sector del lujo, al igual que muchos otros, no quiere perderse la fiesta del metaverso. Las primeras incursiones las llevaron a cabo Louis Vuitton, Balenciaga y Gucci con colecciones para vestir a los avatares virtuales. Estas dos últimas casas de moda cuentan además con equipos totalmente dedicados a la Web 3.0 y al metaverso.
A principios de febrero, Gucci lanzó con éxito SuperGucci, una serie de NFT creados en colaboración con Superplastic, el especialista estadounidense en juguetes artísticos Superplastic, y que se corresponden con figuras físicas de porcelana pintada. Asimismo, la firma de lujo italiana se ha hecho con un espacio digital en The Sandbox, donde planea ofrecer "experiencias inmersivas".
Philipp Plein es otra de las firmas que se ha lanzado al metaverso, en este caso con la compra de una enorme extensión en Decentraland por la que ha pagado el equivalente a 1,2 millones de euros. Prada, por su parte, ha lanzado su línea de ropa deportiva Linea Rossa, compuesta por trajes y equipos virtuales, para el videojuego de deportes extremos Riders Republic, según publica Fashion Network.