El ICO desvela que sólo recibió 1.300 quejas contra la banca por los avales
- Las entidades cifran en una treintena los casos de posibles irregularidades
Fernando Tadeo
El expediente abierto por la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia (CNMC) a varios bancos por una supuesta mala comercialización en los préstamos avalados por el ICO a las empresas ha desatado una disputa y una serie de acusaciones entre el organismo regulador y el sector en las últimas semanas. Además de una guerra de cifras, en la que ha participado hasta el Banco de España.
El ICO, según el informe anual publicado recientemente, cuantifica en 1.298 las reclamaciones recibidas por las líneas Covid-19, es decir el 87% del total que fueron cursadas por su actividad ordinaria. El organismo público explica que el total de quejas por parte de sus clientes ascendió a 1.493, que contrastan con las 136 de 2019. Esta subida se debe fundamentalmente al aumento de la actividad y a los préstamos concedidos a empresas y autónomos tras el estallido de la pandemia.
La institución estatal, añade, que las reclamaciones relativas a la financiación avalada por el coronavirus fueron trasladadas a las entidades que otorgaron el dinero, pero no desvela el motivo de las mismas.
La banca, a raíz del expediente sancionador iniciado por la CNMC, ha defendido en el último mes que los casos de posibles irregularidades han sido mínimos, cifrándolos en una treintena. Una cantidad que sería mínima en comparación con todas las quejas que llegaron al ICO y con el número de operaciones que se han realizado en el programa de créditos avalados por el Covid, que es de un millón (de las que se han beneficiado 650.000 compañías).
El sector, con este dato, ha acusado al organismo supervisor de la Competencia de haber causado un daño de reputación y de telediario "irrecuperable", al haber hecho público el inicio de la investigación, que se basa en la contratación de seguros u otros productos a las empresas y autónomos vinculado al crédito, sin haber llegado a una conclusión.
Banco de España
En medio de toda esta polémica, el Banco de España no ha entrado a defender a ninguna de las partes, pero sí ha informado que a su servicio de reclamaciones llegaron algo más de un centenar (120) y que todas fueron trasladadas al ICO. Además, con el propósito de quitar hierro al asunto, el gobernador Pablo Hernández de Cos, ha señalado que muchas de ellas tenían que ver con la negativa de la concesión.
La CMNC, tal y como expuso hace diez días su presidenta Cani Fernández, no solo defiende su actuación, sino que considera que hay muchos más casos de irregularidades de las que se han denunciado o presentado, ya que, a su juicio, son muy pocas las pymes o autónomos que se atreven a enfrentarse a su banco cuando la financiación es parte esencial de la supervivencia en estos momentos de crisis. De esta manera, da a entender que las sospechas de irregularidades habían sido más numerosas de las denuncias en las que se basa su expediente, sin ofrecer datos.
Ahora, el sector financiero tendrá que esperar a que Competencia concluya sus pesquisas y en el plazo de 18 meses tendrá que adoptar una decisión final. Asimismo, la actuación de las entidades también será analizada por el Banco de España, una vez reciba los informes de auditoría sobre el funcionamiento de las líneas Covid, que próximamente recibirá.
El supervisor bancario, hasta la fecha, solo ha ayudado al ICO a revisar el procedimiento del programa, ante la envergadura del mismo, ya que no cuenta con competencias para otro tipo de cuestiones.
El sector ha concedido hasta la fecha más de 120.000 millones de euros de crédito desde abril de 2020, que ha facilitado la supervivencia del tejido industrial. Del montante, el ICO ha otorgado garantía por valor de 91.000 millones.