Empresas y finanzas

Los sindicatos de tripulantes de cabina piden mediación para que Ryanair no bloquee la negociación del convenio

  • La aerolínea irlandesa afronta una ola de huelgas en Europa
Protesta de trabajadores de Ryanair. Imagen: EFE

elEconomista.es

Los sindicatos de tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) USO y Sitcpla han interpuesto una solicitud de mediación ante el Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA) para que Ryanair abandone el "bloqueo" de la negociación y acceda a la constitución de la mesa negociadora para el I Convenio Colectivo de TCP en Ryanair.

Los sindicatos critican que el pasado miércoles, cuando se celebró la reunión de apertura de la comisión negociadora para el convenio colectivo, la empresa "no quiso" hacer constar en acta quiénes formaban parte de la mesa negociadora "ni la legitimación" de USO y Sitcpla según la legislación española. Además, las dos organizaciones recuerdan que según la legislación los representantes sindicales tienen derecho a la concesión de permisos retribuidos, que las reuniones de la comisión negociadora sea en Madrid y el idioma usado debe ser español.

"Se trata de un mal comienzo para una compañía inmersa ya en una inminente dinámica de conflictos que se avecinan a lo largo de Europa en este verano tanto de pilotos como de TCP en Reino Unido, Portugal, Suecia e Italia", ha manifestado el secretario general de la sección sindical USO Ryanair, Gustavo Silva.

Ambos sindicatos alcanzaron un acuerdo en enero con la aerolínea de bajo coste irlandesa, con base en Dublín, que motivó la desconvocatoria de las dos jornadas de huelga a la que estaban llamados los auxiliares de vuelo de la compañía en España, para normalizar las relaciones laborales bajo el marco jurídico y laboral español, después de varias convocatorias de huelga durante el pasado año.

Ola de huelgas en Europa este verano

Los sindicatos de pilotos y tripulantes de cabina de varios países de Europa están empezando a organizarse para ir a la huelga en agosto ante los problemas que están teniendo para llegar a acuerdos con la compañía de bajo coste e, incluso, para lograr que cumpla los compromisos que adquirió a principios de año para frenar los conflictos laborales.

Los primeros en anunciar movilizaciones han sido los pilotos de Reino Unido, uno de los principales mercados de Ryanair, que el lunes empezaron las votaciones entre sus asociados de cara a convocar huelgas a partir del 19 de agosto. El sindicato británico Balpa critica que Ryanair no está dispuesta a negociar ninguno de los aspectos que preocupa al colectivo como el futuro de las pensiones, la pérdida de los beneficios de maternidad, los subsidios o fijar "una estructura salarial justa, transparente y consistente". "No hemos podido llegar a un acuerdo con la empresa en relación con ninguna de nuestras preocupaciones. De hecho, la compañía no ha presentado ninguna oferta", aseguran.

Los pilotos irlandeses están teniendo los mismos problemas para pactar un cambio en su estructura salarial por lo que han decidido sumarse a las movilizaciones de sus vecinos. Así, la Asociación Irlandesa de Pilotos de Aerolíneas (IALPA), una rama del sindicato Fórsa, arrancó ayer la votación para ver si finalmente convoca una huelga a finales de agosto. Los resultados se conocerán en la primera semana del mes que viene. En este punto, el sindicato también tiene una batalla abierta contra los falsos autónomos en el sector. A finales de 2018 solo el 34% de los pilotos de Ryanair tenía contratos laborales fijos.

En España, el colectivo también está en conversaciones con la compañía pactar mejoras pero de momento no hay ninguna novedad.

Portugal y España, de huelga por los tripulantes de cabina

Portugal ha sido el último país que ha convocado una huelga. En este caso han sido los Tripulantes de Cabina (TCP) que prevén parar cinco días en agosto, tal y como se aprobó el martes en la Asamblea General de SNPVAC. El sindicato explica que la aerolínea de bajo coste se ha negado a cumplir con los acuerdos firmados en noviembre de 2018 por los que Ryanair se comprometía a aplicar la legislación laboral portuguesa. Así, aseguran que no se ha implementado el pago de las vacaciones, la contratación como fijos dentro de Ryanair de todos los TCP con más de dos años de antigüedad, los permisos por paternidad y las vacaciones de 22 días por año.

En España los TCP también están teniendo problemas con los nuevos contratos, ya que incluyen cláusulas contrarias a la ley, con la eliminación de las agencias y con el pago de las nóminas. Así, no consiguen sentarse a negociar un convenio colectivo. Ante los problemas, que llevaron a algunos TCP a cobrar 100 euros en las nóminas, han empezado a analizar convocar huelgas a finales de agosto o septiembre. No en vano, la Inspección de Trabajo ya ha decidido sancionar a la compañía por cesión ilegal de trabajadores al resistirse a cerrar las agencias de contratación Workforce y Crewlink, donde los empleos son temporales.