Adif eleva un 50% la oferta en el AVE a Barcelona para atraer a la competencia de Renfe
- Busca flexibilizar el acceso de nuevo operadores y poner tarifas quinquenales
África Semprún
Adif ha dado un paso más para que la liberalización del sector ferroviario sea una realidad en diciembre de 2020. El consejo de administración del gestor ha aprobado hoy en una reunión extraordinaria una nueva versión de la declaración de la red de 2019 que incluye "buena parte" de las alegaciones presentadas por las empresas del sector así como las propuestas de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Entre otras cosas, el organismo pedía que los paquetes de capacidad se asignasen a empresas distintas, que se abra la puerta a que operen todas las empresas que quieran sin fijar un mínimo de capacidad y que las compañías puedan solicitar entrar en cualquier corredor con la operativa que quieran si son compatibles, incluidos los tradicionales de larga distancia.
El eje Madrid-Barcelona-Frontera francesa tendrá 53 tráficos diarios
El objetivo de la nueva declaración de la red es "flexibilizar" la demanda de capacidad y elevar la oferta en el AVE entre Madrid y Barcelona, que aporta más del 20% de los pasajeros de alta velocidad, para dar entrada a varios competidores. En concreto, el eje Madrid-Barcelona-Frontera francesa tendrá 53 tráficos diarios frente a los 27 de media que opera Renfe actualmente, lo que supone un incremento del tráfico del 50% sobre la oferta actual. Este eje ya no incluye el trayecto Barcelona-Valencia ya que actualmente solo se puede prestar con material rodante de ancho variable.
El objetivo para el segundo corredor, el Madrid-Levante (Valencia y Alicante), es que el tráfico se incremente un 40% pasando de los 37 tráficos actuales a 53 circulaciones diarias con la llegada de nuevos operadores. El eje Madrid-Toledo-Sevilla-Málaga (el tercero) es el que más va a crecer ya que Adif prevé que el número de circulaciones totales sea de 61, lo que implica un incremento del 75% sobre la oferta actual de 35 diarias. En este caso se ha quitado del paquete la ruta Sevilla-Cádiz porque sólo pueden ser prestados por material rodante de ancho variable, que es el que está en manos de Renfe y no permite a empresas con trenes de otros países operarlos. Por ejemplo, SNFC quiere entrar en España con su servicio de bajo coste y los Alstom con los que circula en Francia, que no están adaptados a los distintos anchos de España.
La capacidad en estos tres corredores se elevará un 65% debido "al interés que han suscitado"
En total, la capacidad disponible en estos tres corredores se elevará un 65% debido "al interés que han suscitado entre los potenciales nuevos operadores". En total habrá 165 circulaciones por sentido y día frente a los 99 actuales. Las empresas tienen hasta finales de octubre para presentar las solicitudes de capacidad y el organismo se ha comprometido a resolver las adjudicaciones antes del 15 de diciembre de 2019 para poder tener los contratos firmados en marzo de 2020 y que puedan organizar la oferta de cara a la fecha de la liberalización.
Flexibilidad en capacidad y tarifas
Adif se ha comprometido a atender todas las solicitudes y coordinarlas de tal manera que un paquete pueda ser adjudicado a más de un candidato aunque se priorizarán las ofertas que impliquen un uso intensivo de todos los corredores. Así, en el Madrid-Barcelona podrían llegar a operar más de tres empresas. "La estructura en tres paquetes facilita que, como mínimo, puedan operar de forma óptima al menos tres empresas ferroviarias", señala Adif.
La versión definitiva de las Declaraciones sobre la Red flexibiliza la forma en que las empresas interesadas pueden solicitar capacidad. En este sentido, "los candidatos podrán realizar las solicitudes de capacidad marco ofertada que consideren más adecuadas a su plan comercial, no estando vinculados a solicitar ni todos los servicios, ni todos los ejes de un paquete. Además, podrán solicitar los servicios ofertados en otros paquetes que consideren oportuno".
Adif mantiene que las asignaciones de la capacidad marco se realice durante diez años para dar seguridad jurídica al sector y que pueda amortizar los trenes que compren para operar aunque la CNMC revisará los contratos pasados cinco años. El superregulador había solicitado que el paquete mayoritario tuviera un contrato de cinco años.
Por su parte, también busca flexibilizar la fijación de las tarifas para que la competencia pueda bajar el precio de los billetes y que dejen de ser considerados tributos para que no dependan de los Presupuestos. "Con el objeto de dotar al procedimiento de fijación y revisión de las tarifas de cánones de la flexibilidad necesaria para adecuar las condiciones económicas de acceso a la red a la demanda ferroviaria y que puedan ser utilizados como instrumento de gestión, se está analizando con el Ministerio de Fomento la posibilidad de introducir modificaciones legislativas que permitieran cambiar la naturaleza jurídica de los mismos", asegura la compañía, que se ha comprometido a que tengan una visibilidad de cinco años. Así, el gestor ha asegurado que se realizará "una propuesta de cánones a cinco años que otorgue mayor certidumbre a los operadores ferroviarios".