Alrededor de 7.000 personas celebraron ayer el quinto aniversario de la concesión a la biofábrica de Ence en Pontevedra del prestigioso sello ecológico que otorgan los gobiernos escandinavos, la ecoetiqueta denominada Nordic Swan.Establecido en 1989, el etiquetado de Nordic Swan es uno de los reconocimientos de calidad am-biental con mayor categoría en el sector de la celulosa, y se añade a otros reconocimientos ambientales de la instalación, como la Distinción de Oro otorgada por la Comisión Europea.Esta última distinción la ha recibido por su trayectoria de mejora medioambiental por cumplir holgadamente los parámetros ambientales que establece la normativa, señala la compañía.