La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ya ha comunicado a Adif los cambios que tienen que realizar a la Declaración sobre la Red de alta velocidad de 2019 para facilitar la entrada de competidores en el transporte ferroviario de pasajeros.En su dictamen, que es vinculante, el superregulador hace especial hincapié en la duración de los contratos marco, que Adif ha fijado en diez años para "dar estabilidad a los nuevos operadores", y en el método establecido para asignar la capacidad marco a empresas diferentes. Así, el principal objetivo de la CNMC es dar entrada a más de dos competidores y reducir a cinco años la vigencia del paquete A, el que más circulaciones al día incluye, ya que es el que previsiblemente se adjudicará Renfe, por lo que, a diferencia del resto de los actores, el operador ferroviario público solo podrá blindar durante un lustro, prorrogable, su acceso a los tres corredores del AVE que se abren a la libre competencia bajo este modelo de paquetes: Madrid-Barcelona, Madrid-Valencia-Alicante y Madrid-Sevilla-Málaga. Por ejemplo, el paquete A del Corredor Madrid-Barcelona contempla 32 circulaciones al día, que es más o menos la oferta actual de Renfe.En cuanto a la adjudicación de la capacidad disponible por paquetes, la CNMC quiere limitar este sistema a los casos en los que "las solicitudes de capacidad marco superen la disponibilidad". Así, el organismo recuerda a Adif que las em-presas ferroviarias deben tener la opción de solicitar la capacidad marco que consideren adecuada a su plan de negocio. "No deben quedar condicionadas por la estructura de los paquetes propuestos por el gestor", asegura. En esta línea, también quiere abrir la red a más de dos nuevos competidores, por lo que, si las solicitudes no superan la disponibilidad, el gestor ferroviario debe adjudicar capacidad para operar (surcos) a todas las empresas que la soliciten.