El Partido Laborista británico, encabezado por Jeremy Corbyn, ha anunciado su intención de nacionalizar las redes eléctricas del Reino Unido, valoradas en unos 68.900 millones de euros, y crear una Agencia Nacional de la Energía, lo que perjudicaría a Scottish Power, subsidiaria de Iberdrola en el país. Así lo ha divulgado en Twitter Rebecca Long-Bailey, responsable de negocios y energía del Partido, aunque se espera que hoy el propio Corbyn haga un anuncio oficial y detallado. Según recoge la prensa local, la medida se adoptaría poco después de las elecciones, en mayo de 2022.Al parecer, los laboristas acometerían la nacionalización y compensarían a las empresas mediante la emisión de bonos respaldados por el Estado, con el valor que decidiera el Parlamento, de un modo similar al que se usó para nacionalizar Northern Rock en 2008. Encarecerá el servicioSegún Reuters, las empresas del sector han criticado el anuncio en mayor o menor medida, argumentando que perjudicaría las inversiones, aumentaría los costes de los consumidores y retrasaría la transición energética. Un portavoz de Scottish Power ha defendido su labor: "Somos una de las empresas más grandes de Escocia, mantenemos miles de empleos y este año invertimos un récord de siete millones de libras todos los días", así como su calidad: "Nuestras redes funcionan correctamente al 99,9 por ciento y cuesta 35 peniques al día a los clientes"Iberdrola facturó 1.275 millones de euros por las redes en el país durante el año pasado, con un resultado bruto operativo (ebitda) de 919 millones.