El Banco Santander ha puesto sobre la mesa las primeras cifras del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que va a llevar a cabo tras la integración tecnológica del Popular. El grupo cántabro anunció ayer a los sindicatos un ajuste de 3.713 empleados y 1.150 oficinas. El recorte supera la cifra de 3.000 afectados con la que se especuló inicialmente y que nunca desmintió la entidad. El ajuste supondría una reducción del 11 por ciento de la plantilla y del 26 por ciento de la red de España. Sin embargo, teniendo en cuenta el ERE que ejecutó el banco el año pasado en los servicios centrales de ambas entidades y desglosando los números del que era el sexto banco del país antes de su caída, el anuncio representa un ajuste del 50 por ciento de la plantilla del Popular y de hasta el 81 por ciento de las oficinas. El Santander adquirió el Popular el 6 de junio de 2017. Entonces el banco que hasta el momento había presidido Emilio Saracho contaba con 9.209 empleados y 1.416 sucursales en España, según las cuentas del primer semestre de dicho año presentadas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El grupo cántabro ejecutó entre finales de 2017 e inicios de 2018 un ERE que afectó a 1.100 trabajadores, que sumados a las 3.700 nuevas salidas, supondría un recorte de hasta 4.800 empleados desde la adquisición del Popular, la mitad de su plantilla. Asimismo, entre el cierre de las 1.150 sucursales que ha planteado y la reducción orgánica, el ajuste de oficinas supera el 80 por ciento. No obstante, cabe destacar que éstas son las primeras cifras que ha planteado la entidad y ahora comienza una fase de negociación con los representantes de los trabajadores que podría reducir, como ha ocurrido en ocasiones anteriores, el número de salidas. Secciones afectadasLos ajustes de plantilla se producirán en la red comercial con 2.847 salidas, en las estructuras intermedias (588 afectados) y en los servicios centrales (278 empleos), con el objetivo de evitar solapamientos, redundancias y duplicidades. Asimismo, se cerrarán 929 oficinas de la Red Universal, otras 200 pasarán a la Red de Agentes y se eliminarán 21 de banca privada, según UGT. El Banco Santander volverá a reunirse con los representantes sindicales el jueves día 23 para continuar las conversaciones.La entidad comenzó la integración de la tecnología del Santander en las sucursales del Popular el pasado otoño con una prueba piloto en solo dos oficinas. A cierre del pasado mes de marzo, el banco ya había completado la unión tecnológica de las sucursales del banco adquirido de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Cataluña y Canarias. Esto supone la integración de 600 oficinas, el 40 por ciento del total de la red del Popular. El consejero delegado del grupo, José Antonio Álvarez, aseguró el pasado 30 de abril, en la presentación de los resultados del primer trimestre del año, que el banco terminará de unificar los sistemas de las sucursales en el mes de julio. El Santander aumentó la previsión de las sinergias que otorgará la fusión total de ambas entidades, al pasar de un ahorro de 500 millones a 750 millones de euros anuales, según expuso en su nuevo Plan Estratégico a medio plazo presentado el 3 de abril, en parte, gracias a este nuevo ajuste de la red.