Un juzgado da la razón a las hermanas Álvarez y valida las cuentas de la sociedad patrimonial Iasa de 2015 y 2016Nueva victoria de El Corte Inglés frente al expresidente del grupo, Dimas Gimeno y su familia. Si hace diez días, los tribunales archivaban la querella presentada por éste contra Juan Carlos Cernuda, exdirector del área de Seguridad, por supuestas irregularidades, el juzgado de lo Mecantil número 2 de Madrid ha desestimado ahora la anulación de las cuentas de la firma patrimonial Iasa de los ejercicios 2015 y 2016, que había solicitado María Antonia Álvarez, la madre de Gimeno. La demanda se presentó por una supuesta vulneración del derecho de información y por existir, presuntamente, "una condonación de deuda camuflada" por valor de siete millones en las cuentas de 2016. Iasa es la patrimonial que aglutina las acciones que dejó en herencia el expresidente Isidoro Álvarez, fallecido en 2014. La firma es el segundo accionista de El Corte Inglés con el 22 por ciento del capital. El problema es que el 69 por ciento de sus acciones está en manos de las hijas de Isidoro Álvarez, Marta y Cristina, y el resto lo tienen sus hermanos César y María Antonia, y el hijo de ésta, Dimas. En la sentencia fechada el 13 de marzo, el juzgado declara probado que en la Junta de Iasa se aprobaron las cuentas y la gestión del órgano de administración sin que se impugnara el punto del orden del día relativo al reparto de dividendos. "Si se estaba en desacuerdo con las cuentas a aprobar, se debería haber impugnado igualmente sus consecuencias, referido al apartado de dividendos, pues cualquier impugnación de lo primero afectaría a lo segundo inevitablemente", señala la sentencia.El juez señala también que la empresa fue auditada, lo cual conocían las partes.En cuanto a la petición de la condonación de la deuda con María José y Cristina Álvarez, la sentencia señala que es objeto de tratamiento de otro procedimiento, y que "no ha sucedido como reconoce la demandante en su escrito de conclusiones". La batalla judicial, en cualquier caso, no ha terminado, y hay tres vistas pendientes: por la supuesta condonación de la deuda a las Álvarez, por una ampliación de capital que, según la familia de Gimeno, supuso un vaciamiento patrimonial y hasta por la adopción de las dos hermanas.