Según los datos del INE, un turista chino gasta en España más del doble que un alemán. Concretamente, el gasto medio per cápita del asiático en España se situó en 2.563 euros a cierre de 2018, frente a los 1.052 euros del procedente de Alemania, uno de nuestros principales mercados. Para Global Blue, estas cifras evidencian cómo el modelo español de turismo tiene recorrido para aumentar su rentabilidad, lo que pasa por seducir al turista de largo radio, caracterizado por su mayor capacidad de gasto. Y es que el perfil del extranjero que visita nuestro país responde, mayoritariamente, con el de ciudadano de la UE que viaja principalmente en verano y dispone para su estancia de un presupuesto próximo a los 1.000 euros. Así, el turista chino el año pasado se dejó en España más de 1.309 millones pese a representar el 0,7 por ciento de los turistas internacionales.