Las incidencias y retrasos que se registran casi a diario en Cercanías y los ferrocarriles tradicionales, sobre todo el extremeño, han llevado al Ministerio de Fomento a replantearse la política de inversión de Adif y Adif AV. Tras varios años centrados en impulsar la alta velocidad, el departamento que dirige José Luis Ábalos ha decidido recotar un 2 por ciento la inversión real destinada a la red del AVE, hasta los 2.660 millones de euros, para triplicar los fondos destinados a la Red Convencional hasta los 2.244 millones. "Estos presupuestos está alineados con la voluntad de revertir el abandono al que se había sometido a la red convencional y a los Cercanías en los últimos años", explicó Ábalos. En concreto, en los Cercanías de las principales ciudades se ha previsto una inversión total de 1.353 millones de euros, el triple que en 2018. Esta cifra incluye unos 1.090 millones que invertirá Adif en mejorar la red y las estaciones y 263 millones de Renfe. A su vez, hay una partida de 67 millones que pagará Seittsa para construir el acceso a la nueva terminal del aeropuerto de Barcelona. Aunque Fomento no ha especificado el reparto geográfico de la inversión en la red, sí que ha señalado que los Rodalias de Cataluña se llevarán unos 650 millones, lo que supone la mitad del presupuesto de Cercanías. Y es que, Cataluña se ha convertido en una de las CCAA más beneficiadas de los presupuestos de Fomento, ya que crece casi un 18 por ciento con respecto al año pasado, mientras que en otros sitios como Madrid, cae. Ábalos ha explicado que esto responde a criterios de necesidad de infraestructuras, población y aportación al PIB, por lo que ha pedido no "hacer demagogia". Aún así, ha señalado que "todos los catalanes y catalanas deben de estar contentos". Otra CCAA en la que también ha crecido bastante la inversión de Fomento es Extremadura (35 por ciento), donde el ministro ha reconocido que "tenemos un problema con un ferrocarril que parece que lo centra todo y, por lo tanto, hay que invertir más". En líneas generales, el presupuesto de Fomento ha crecido un 23,5 por ciento hasta los 13.050 millones, e incluye 9.973 millones de inversión real, un 26,6 por ciento más, y 1.204 de tranferencias de capital a las CCAA. De esta última partida se destinarán a vivienda 649 millones, un 43,4 por ciento más. El reparto todavía no está territorializado puesto que hay que negociarlo con las autonomías, aunque se prioriozarán las necesidades de construcción de vivienda. En esta línea, Ábalos ha asegurado que está abierto a negociar con todos los partidos políticos enmiendas a las Cuentas, incluyendo la opción de limitar el alquiler que le exige Podemos. En cuanto a Carreteras, Fomento prevé destinar una partida de 2.328 millones de euros, un 14,1 por ciento más, de los que 990 millones serán para mantenimiento.