Debía desaparecer de los surtidores al año pasado, pero se mantendrá todo 2019El Gobierno ha decidido que durante todo el año 2019 las gasolineras sigan vendiendo gasolina de 95 octanos, técnicamente denominada "gasolina de protección". Se trata de la tercera prórroga que experimenta la venta de este carburante -originalmente estaba previsto que desapareciera en 2013-, que deben consumir los vehículos más antiguos para evitar problemas en el motor. Se prevé que la medida ahorre cerca de 500 millones a los consumidores, que de otro modo tendrían que repostar con gasolina de 98 octanos, cuyo precio es unos 13,4 céntimos de euro por litro más elevado. El ahorro medio por usuario rondará los 140 euros al año. De acuerdo con los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), a 31 de diciembre de 2017 había 10 millones de vehículos de gasolina circulando; de ellos, 3,5 millones se habían matriculado antes del año 2000 y sus motores deben funcionar con carburante de 95 octanos, esto es, con un contenido máximo de oxígeno del 2,7 por ciento en masa y un 5 por ciento máximo de etanol en volumen. En caso contrario, se puede dificultar la conducción y se pueden producir pérdidas de potencia o un funcionamiento inestable por la irregularidad del flujo del combustible. Los automóviles posteriores a esa fecha pueden repostar indistintamente con gasolina de 95 o de 98 octanos. Esta última tiene mejores tratamientos químicos, mejores aditivos, menos azufre y está más refinada; su contenido máximo de oxígeno en masa es del 3,7 por ciento y el de etanol en volumen alcanza el 10 por ciento. No obstante, algunos fabricantes la recomiendan para sus vehículos más potentes -normalmente se indica en la propia tapa del depósito-, y es habitual en aquellos con motores con una compresión superior a 10,5:1. Prorrogado desde 2013 La normativa europea, la Directiva 98/70/CE, relativa a la calidad de la gasolina y el gasóleo, establece que los 28 socios comunitarios deben garantizar la comercialización de gasolina de 95 octanos hasta 2013, aunque permite que se prorrogue si lo consideran oportuno. La legislación española recogió el mandato y fijó el límite en 2013, pero cuando llegó ese año el parque de vehículos de gasolina anteriores al año 2000, según la DGT, ascendía a 5,9 millones, alrededor del 40 por ciento del total. Ante esta situación, el Gobierno decidió prorrogar durante tres años, hasta 2016, la obligación de suministrar gasolina de 95 octanos. Y llegado este ejercicio, se volvió a prorrogar dos años más, hasta el pasado 31 de diciembre. Pero España tiene uno de los parques de automóviles más avejentados de la UE, con una media de 12,2 años, y a finales de 2017 el número de vehículos de gasolina anteriores al año 2000 todavía era muy significativo, el 35 por ciento de los que usa este carburante, según la DGT, y el 31 por ciento según la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). La tendencia de sustitución del parque de vehículos, según los datos de Anfac es del 2,5 por ciento anual, de modo que durante el presente 2019 el total de automóviles que todavía requerirán gasolina de protección se situará en el entorno del 27,5 por ciento. En consecuencia, el Gobierno se planteó prorrogar la obligación de servir gasolina de protección durante seis meses más, hasta el próximo 30 de junio, según recogía el borrador de la Orden de peajes y cánones del sistema gasista para 2019. La CNMC pide más plazo Sin embargo, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en su preceptivo informe sobre esta propuesta normativa, pidió extender ese plazo, tanto porque todavía hay un porcentaje muy elevado de vehículos que requieren la gasolina de protección, como porque la senda de modernización del parque de vehículos "podría no llegar a producirse en tu totalidad, en atención al ya constatado descenso de las ventas de automóviles en los últimos meses, motivado fundamentalmente por el retraso en las decisiones de compra de los conductores ante las nuevas directrices que podrían marcar la política energética en el medio plazo, tanto en España como en el seno de la UE, en relación al transporte por carretera". En consecuencia, reclamó extender el plazo previsto para la prórroga. El Gobierno ha escuchado, y en la La Orden TEC/1367/2018, de 20 de diciembre, por la que se establecen los peajes y cánones asociados al acceso de terceros a las instalaciones gasistas y la retribución de las actividades reguladas para el año 2019, publicada el pasado 22 de diciembre, incluye en su disposición adicional segunda la ampliación hasta el 31 de diciembre el plazo en el que deberá estar disponible la gasolina de 95 octanos.