Supondrá una inversión de 100 millones, que recibió también el aplauso del PSOELa consejera de Economía de Castilla y León, Pilar del Olmo, ha confirmado que se ha logrado un acuerdo para garantizar el futuro de la planta de Vestas en Villadangos de Páramo (León) con un inversor industrial, cuyo nombre no quiso desvelar, pero matizó que no se trata de Gonvarri. "El acuerdo va muy bien y está cerrado, a falta de pequeños detalles por parte del Ministerio de Industria. En un breve espacio de tiempo será él (inversor) quien explique ese proyecto y lo hará público", indicó Del Olmo en la jornada organizada por elEconomista: "Castilla y León: Ventajas competitivas para la inversión". La consejera subrayó que "lo importante" es que ese acuerdo se ha podido cerrar con el trabajo conjunto de todas las administraciones con el inversor "para que sea una realidad". La venta se producirá con la ayuda de la Junta de Castilla y León, que ha jugado un papel muy activo a la hora de encontrar un candidato para esta instalación y de la que se han dado importantes pasos adelante con la visita del presidente y consejero mundial de Vestas, Anders Runevad, a la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera. La operación supone una inversión de 100 millones y la creación de 250 puestos de trabajo. La Junta, de hecho, ya había avanzado que el comprador se trataba de "un industrial conocido en esta tierra" que llega con un proyecto "definido y muy solvente" y era unu empresario familiar. El secretario general del PSCyL, Luis Tudanca, expresó su alegría porque se pueda dar "una buena noticia" a los leoneses sobre la fábrica de Vestas. El anuncio del cierre de la planta de Vestas en Villadangos del Páramo provocó un verdadero cataclismo en la provincia leonesa por la pérdida de medio millar de empleos directos y otros tantos indirectos. La Junta de Castilla y León, trabajadores y centrales sindicales protestaron porque la planta estaba en beneficios y se había dejado pasar el plazo de mantenimiento del empleo al que le obligaban las ayudas recibidas, 12,5 millones, para anunciar la decisión. El Gobierno regional e Industria unieron fuerzas para presionar a la multinacional para que vendiera la planta.