El presidente de la Fundación Bancaria 'laCaixa' destaca también su dividendoIsidro Fainé, presidente de Criteria y la Fundación Bancaria laCaixa, define la salida del capital de Repsol por parte de CaixaBank como "súbita". En una entrevista concedida a El Nuevo Lunes insiste en que poco o nada ha tenido que ver con la decisión de vender el 9,4 por ciento que el banco tenía en la energética y que se debe a una decisión del consejero delegado, Gonzalo Gortázar, de asegurar la cuenta de resultados en el futuro. Tras esta desinversión, anunciada en septiembre, el banco ya solo está presente en Telefónica, con una participación de en torno al 5 por ciento. Sin embargo, para Fainé, la permanencia del grupo en el capital de la teleco aporta un buen dividendo y ventajas en el ámbito tecnológico, pese a la evolución de la acción. "Si adelantamos a nuestros competidores en todos los asuntos tecnológicos, es por Telefónica", asevera. Recuerda que la entrada en Repsol no fue estratégica, sino para defender a Gas Natural y, a su juicio, aunque es una compañía muy bien dirigida, él nunca hubiera entrado por dos razones: "Porque el precio de las acciones en una industria como esa fluctúa mucho y porque la regulación bancaria europea penaliza las participaciones". Cambio de sede El que fue presidente de CaixaBank también centra parte de la entrevista en explicar el cambio de sede del banco de Cataluña a Valencia que, precisamente, se anunció hace un año, en octubre de 2017. "Tuvimos que tomar una decisión drástica, casi sin contar con nadie", asevera. Fainé asegura que la entidad actuó cuando se vio que podía haber un problema de liquidez a medio plazo y siempre teniendo en cuenta la respuesta que podían obtener del Banco Central Europeo (BCE). "Tú dices en Bruselas o en Fráncfort: 'Necesito 100.000 millones de euros' y te contestan: "Vale, vale, pero tus acciones van a valer un euro". Lo más importante son los ahorros de los clientes, son sagrados", justifica. Asimismo asegura que en plena batalla de Cataluña con el Gobierno central, el entonces presidente Mariano Rajoy no le pidió nada. "Fue una lucha entre la cabeza y el corazón", dice. Y ganó la primera. Para Fainé, Cataluña siempre ha sido muy europea y la posibilidad de irse de Europa era inconcebible: "Ni Cataluña, ni ninguna región ningún país de la Europa actual puede vivir ni diez minutos fuera del euro". Respecto al presidente Pedro Sánchez, al que visitó recientemente en La Moncloa, dice que le apoyará en su nuevo plan de lucha contra la pobreza infantil. Y matiza: "De momento, aún no hemos concretado nada más, al margen de esta voluntad [...] por parte de la Fundación". En lo político, se define de mente abierta, moderado y contrario a los extremos y a cada presidente de Gobierno agradece un aspecto. A González, que metiera a España en la UE; a Aznar, que lo hiciera con el euro; a Rajoy, que evitara el rescate y a Sánchez, que lidie con la complicada situación actual. Para Fainé uno de sus grandes éxitos fue su incorporación a laCaixa en 1981 y, entre sus deseos de futuro, que dure otros cien años más.