Iberdrola anunció ayer que ha comenzado el desarrollo de su parque eólico marino -denominado off shore en inglés- de Baltic Eagle, en aguas alemanas, con una campaña geotécnica de estudio y caracterización del lecho marino en la que invertirá más de 10 millones de euros. Iberdrola se adjudicó el proyecto de Baltic Eagle, con 476 MW de potencia, en una subasta celebrada a finales de abril en la que también se adjudicó otra instalación mucho más pequeña, Wikinger Süd, de 10 MW. Ambos proyectos aprovecharán las infraestructuras de evacuación de electricidad de otro parque eólico ya operativo, Wikinger, creando una gran instalación de 836 MW en la que se habrán invertido unos 2.500 millones de euros conjuntamente. Hasta marzo de 2019 Fugro acometerá los trabajos de caracterización del fondo del mar hasta marzo de 2019. Primero rastreará la zona para localizar explosivos sin detonar de las guerras mundiales y luego analizará el lecho a una profundidad hasta de 45 metros.