CAF ha incrementado su beneficio neto un 12 por ciento en el primer semestre del año gracias al aumento de la ventas y pese a la modificación de la norma foral de impuestos sobre sociedades que ha duplicado el impuesto sobre beneficios pagado por la empresa. En la primera mitad del año, el fabricante ha registrado unas ventas de 943 millones de euros, lo que supone un incremento del 25 por ciento con respecto al mismo periodo del año pasado. El ebitda apenas ha mejorado un 1 por ciento pero la reducción de los costes financieros del 30 por ciento han ayudado también a mejorar las ganacias netas, que alcanzan los 18 millones de euros. En cuanto al futuro de la compañía, CAF ha cerrado el semestre con una cartera de pedidos de 5.728 millones de euros y tiene un pendientes por concretar unos 1.000 millones más entre contratos para firmar y adjudicaciones en las que son proveedores preferentes. A su vez, durante el primer semestre cerró la compra de la empresa polaca Solaris para diversificarse en movilidad.