El beneficio antes de impuestos fue de 25,7 millones de euros Calidad Pascual registró una facturación de 675 millones de euros durante 2017, lo que supone un incremento del 2 por ciento respecto al ejercicio anterior. El resultado bruto de explotación (ebitda) ascensió a 74 millones, un 2,7 por ciento superior al del año previo, según comunicó la compañía a través de su Informe de Creación de Valor Compartido 2017. El pasado ejercicio redujo su deuda en un 7,7 por ciento, desde 208 a 192 millones de euros. En total, Calidad Pascual ha reducido su deuda en 140 millones de euros desde la firma del préstamo sindicado en 2013. Debido a los avances conseguidos por la compañía ha podido obtener un beneficio antes de impuestos de 25,7 millones. El impacto económico total generado por la compañía con sede en Aranda del Duero, Burgos, fue de 1.345 millones de euros y promovió a 14.235 empleados a jornada completa y consiguiendo que un 93,3 por ciento del total de trabajadores tengan contrato definido. La estrategia de Calidad Pascual con horizonte fijado en el año 2020 busca impulsar la internacionalización, mejorar la competitividad y consolidar la calidad total. Otro de los datos que se desprende del informe es la búsqueda de un comportamiento social responsable. En palabras del presidente de Calidad Pascual, Tomás Pascual, "hemos creado la Comisión de Responsabilidad Social Corporativa dependiente del Consejo de Administración para velar por el cumplimiento de la política de Responsabilidad Social Corporativa recién revisada, tanto en el seguimiento del impacto social de la compañía como en el despliegue del modelo de gestión responsable en nuestra forma de hacer negocio". La compañía también ha informado han conseguido reducir un 26 por ciento el consumo de energía eléctrica, un 15 por ciento el consumo de agua y un 65 por ciento los residuos enviados al vertedero, a lo largo de los últimos siete años.