IAG ha arremetido contra las huelgas de los controladores aéreos franceses al ver su operativa amenazada un año más con la temporada alta a la vuelta de la esquina. El consejero delegado de IAG, Willie Walsh, ha criticado que la gestión del tráfico en Europa "es un desastre por los paros de los controladores". Por ejemplo, solo ayer, Vueling se vio obligada a suspender 26 vuelos, Iberia, 27; British Airways, 36 y Air Nostrum, unos 14. Por su parte, easyJet y Ryanair alertaron del riesgo de cancelaciones y retrasos por los paros, que suman ocho días sólo este mes. Pese a que la huelga, que amenaza con extenderse durante el fin de semana, afecta a casi todas las aerolíneas, Vueling es la firma del holding que se ve más afectada por el conflicto laboral. No en vano, el 53 por ciento de los vuelos de la compañía catalana dependen del centro de control de Marsella, que está paralizado por la huelga del sector público francés al que se ha sumado el colectivo. "Estas huelgas causan un gran impacto operativo en la compañía", aseguró el directivo de IAG. A su vez, la actividad de Vueling para este verano está en riego por la huelga convocada por los controladores de Barcelona.