El banco prepara más ajustes para bajar los gastos un 5%, hasta los 400 millonesLiberbank sale de pérdidas. El banco ha ganado 29 millones de euros hasta marzo, un 9 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior, y deja atrás los números rojos que arrastraba desde el tercer trimestre de 2017. La entidad realizó saneamientos por 600 millones de euros el pasado verano, después de que, contagiado por la resolución del Popular, la CNMV le suspendiera la cotización por los ataques especulativos. El banco llegó a septiembre con pérdidas de 270 millones, y cerró el año con un resultado negativo de 259 millones. El margen de intereses creció un 2,4 por ciento hasta los 105 millones, mientras que las comisiones netas se elevaron un 3,1 por ciento, hasta los 44 millones. El ratio de morosidad bajó del 13 por ciento al 7,8 por ciento en un año, en línea con los objetivos marcados tras la ampliación de capital que realizó en otoño. En cuanto a la solvencia, el ratio de capital CET1 fully loaded alcanzó el 12 por ciento. La cartera de crédito creció un 5,2 por ciento, hasta los 28.807 millones. Las nuevas operaciones de préstamos alcanzaron los 1.475 millones, de las que las hipotecas supusieron 391 millones, un 30,2 por ciento más que un año antes. El consejero delegado de la entidad, Manuel Menéndez, aseguró que el banco mantendrá su hoja de ruta en solitario, aunque analizará las opciones de fusiones que lleguen siempre que tengan sentido empresarial e interés para el accionsta. Reducción de costes La entidad realizará nuevos ajustes este año. Menéndez destacó que el objetivo para el cierre de 2018 es bajar los gastos a 400 millones, un 5 por ciento menos respecto a 2017, y para ello se seguirá haciendo recortes. De momento, el banco tiene en marcha un Erte (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) que se extiende hasta 2020 y un colectivo de empleados que está con contratos suspendidos. "Por esta vía hay una posibilidad para bajar gastos", dijo Menéndez, que también apuntó a la revisión de otras "bolsas de gastos". El banco cuenta en la actualidad con 4.007 empleados, 695 trabajadores menos que hace un año. Además, ha cerrado el 13,4 por ciento de las oficinas hasta situarlas en 752 a marzo de 2018. El director financiero de la entidad, Jesús Ruano recordó que el ajuste de la red no ha drenado los volúmenes por recursos de clientes por oficina, que crecieron un 12 por ciento hasta los 38 millones.