La entidad culmina este fin de semana la integración de su filial británica, TSBEn plena vorágine de vaticinios sobre futuras fusiones en el sector financiero, el presidente del Banco Sabadell, Josep Oliu, descartó ayer que el grupo esté en "modo consolidación". En estos momentos, la entidad se marca como primer objetivo elevar la rentabilidad y hacer el banco más sostenible antes de cualquier fusión o adquisición, según comentó su presidente en la comida previa a la Junta General de Accionistas, que la entidad celebra hoy por primera vez en Alicante tras el traslado de su sede. "La consolidación nos vendría a contrapié porque lo más importante es consolidar nuestro modelo de negocio y llegar a una rentabilidad adecuada", aseveró. Además, añadió que cualquier cosa que sea distraer el foco de la transformación digital sería "perder el tiempo". Oliu también aprovechó para desechar los rumores sobre una posible fusión con Bankia, y aunque no negó la posibilidad de haberse sentado con el presidente de la entidad, José Ignacio Goirigolzarri, como hace con todos los presidentes de banco, sí dijo que en ningún caso se ha tratado ese tema. Al hilo de Bankia, reconoció que la tarea del Estado de desinvertir lo más rápido posible a la par que conseguir el mejor precio es "complicada", puesto que es totalmente "contradictorio". Respecto a las fusiones transfronterizas, hecho al que apuntan tanto los supervisores como la patronal de la banca española, mostró su escepticismo en este momento puesto que, a su juicio, aún se desconocen "cuáles son las sinergias que se pueden sacar". "Tampoco hay incentivos para que se produzcan estas fusiones", añadió. Eso no descarta, según el presidente del Sabadell, que algún banco tenga interés en ampliar su negocio en un país y haga una adquisición determinada. Unión total en Reino Unido El Sabadell afronta por fin este fin de semana la integración total de su filial británica TSB. El grupo realizará la migración de datos hacia su propia plataforma, puesto que hasta el momento la información se mantenía en la plataforma de su antiguo dueño, Lloyds Banking Group. Tener plataforma propia, tras dos años de creación, supondrá un ahorro de costes para la entidad de cara a este año de en torno a 90 millones de euros, y para 2019 de otros 180 millones de euros. Hasta el momento, el banco tenía que afrontar un coste de 20 millones de euros mensuales por utilizar la plataforma tecnológica de Lloyds. Tan solo en 2017, el Sabadell afrontó un coste de 239 millones de euros por la subcontratación de esta tecnología, y los gastos totales asociados a la migración ascendieron a 382 millones. La plena independencia del banco en su filial británica va a permitirle lanzarse al negocio de las pymes, donde espera obtener subvenciones por parte del Gobierno británico, pero también aprovechar para reducir costes en TSB. El banco no prevé cambiar la marca del banco en Reino Unido, ya que para el cliente el nombre Sabadell no es relevante y estima que el negocio de su filial británica aportará el 20 por ciento del ebitda de cara a 2019. Tras la desconexión total de TSB de la plataforma tecnológica de su antiguo dueño, Lloyds deberá pagar al Sabadell 500 millones, según se estipuló en 2015 en el contrato de venta.