La Organización Marítima Internacional (OMI) ha adoptado una Estrategia para reducir las emisiones de CO2 de las embarcaciones al menos un 50 por ciento en 2050 en relación a los niveles de 2008, con vistas a suprimirlas totalmente tan pronto como sea posible. Más de 100 países representados en la OMI -una entidad de la ONU- aprobaron el pasado viernes la Estrategia, que se revisará en 2023 y tiene tres "niveles de ambición": Reducir la intensidad de las emisiones de CO2 gracias a la introducción de criterios de diseño eficientes en las nuevas embarcaciones. Aminorar las emisiones de CO2 de los buques operativos, al menos un 40 por ciento en 2030 y con la intención de alcanzar un 70 por ciento en 2050, en relación a 2008. Alcanzar el pico de emisiones tan pronto como sea posible y reducir las emisiones al menos un 50 por ciento en 2050 en relación a 2008,siguiendo el Acuerdo de París. El transporte marítimo internacional representa entre el 2 y el 3 por ciento de las emisiones globales de CO2, pero puede alcanzar el 10 por ciento en 2050 si los estados no adoptan ningún tipo de acuerdo.