Ferrovial analizará la relicitación de las autopistas de peaje quebradas que el Ministerio de Fomento volverá a sacar al mercado en el segundo semestre de este año. El consejero delegado del grupo, Íñigo Meirás, señaló ayer en respuesta a un accionista durante la junta ordinaria que "no deja de ser una oportunidad más de negocio que analizaremos cuando sepamos exactamente las condiciones y veremos si hay una oportunidad de creación de valor para nuestros accionistas, pero a día de hoy no tenemos una decisión tomada". Meirás recordó, en cualquier caso, que el impacto en Ferrovial de la reversión de las autopistas de peaje, en su caso de la R-4 y de la AP-36, en 2017 "ha sido cero", toda vez que provisionó toda la inversión hace ya unos años. Por su parte, el presidente de Ferrovial, Rafael del Pino, incidió en el "grado elevado de optimismo" con que el grupo mira al futuro, con el foco puesto en Estados Unidos, sobre todo, Canadá y Australia. En esta visión, destacó el cambio de tendencia en España.