Cajamar cerró la semana pasada la venta de 630 activos inmobiliarios al fondo de inversión Axactor, con un valor de tasación superior a 30 millones de euros. El 75 por ciento de la cartera, denominada Tango II, está compuesta por activos residenciales situados principalmente en la Comunidad Valenciana, Andalucía y Región de Murcia. Con esta operación el grupo cooperativo culmina el proyecto Tango que le ha permitido vender más de 1.000 activos con un valor de unos 90 millones de euros. El primer lote, compuesto por unos 400 activos y con un valor bruto de 57 millones de euros, fue vendido a finales del pasado año. Ambas transacciones se han llevado a cabo en procesos competitivos. Axactor, además, ha adquirido otra cartera de tóxicos a otra entidad financiera, de la que no ha querido detallar. En concreto, se ha hecho con inmuebles adjudicados por 80 millones y un lote de préstamos dudosos compuesto de 16.000 expedientes con un valor de 150 millones.