Socimis y promotoras inmobiliarias cotizan con un descuento medio del 7% sobre su NAV tras las últimas caídas en bolsa, y, sobre todo, por el crecimiento de doble dígito de su negocioEl sector inmobiliario ha inyectado 5.000 millones de euros al mercado en los últimos meses con las salidas a bolsa de Neinor y Aedas Homes el año pasado a lo que se sumó en el arranque de febrero Metrovacesa. Y todavía faltan actores por llegar. Con las OPV previstas de la socimi Testa Residencial -propiedad también de los bancos, como la promotora capitaneada por Jorge Pérez de Leza- y la inmobiliaria Vía Célere antes del verano la capitalización del sector puede engordar en cerca de 2.000 millones de euros. "Hay dos palancas en las que debemos centrarnos: animar a compañías ajenas al sector inmobiliario a que también accedan al mercado bursátil y también sería muy interesante empezar a ver salidas de compañías familiares", afirmó Enrique Gutiérrez, socio director de Financial Advisory de Deloitte, durante la celebración esta semana de la III Edición de la jornada Empresas que aportan valor al accionista, organizada por elEconomista en la Bolsa de Madrid con la colaboración de BME, Ibercaja y Ferrovial y patrocinado por Deloitte. El sector inmobiliario, que ya ha dado el primer paso, ha pasado en solo unos meses de cotizar con prima sobre el valor de sus activos a hacerlo con un importante descuento, propiciado no sólo por las caídas en bolsa sino por crecimientos de doble dígito en el NAV que, previsiblemente, se mantendrán también en 2018. De ahí, el desfase actual entre su capitalización y lo que valen sus carteras de inmuebles, que el sector defiende que tenderán a igualarse en el futuro. Primeros pasos del ciclo: promotoras El sector inmobiliario cotiza, de media, un 7 por ciento por debajo de lo que valen sus activos, aunque la penalización es mucho más abultada si se distingue entre promotoras (cuyas acciones se sitúan un 10,3 por ciento por debajo del NAV) y socimis (un 4,3 por ciento). En el caso concreto de Neinor, Aedas y Metrovacesa la situación bajista actual de las bolsas ha venido a aderezar el temor de los inversores a que las nuevas promotoras no sean capaces de cumplir con sus expectativas, tras el profit warning que presentó la firma liderada por Juan Velayos a finales de febrero. Ellas, sin embargo, insisten en que todavía están tan sólo al inicio de su propio ciclo inmobiliario que llegará a su punto más alto en unos seis o siete años, cuando se alcancen las 150.000 viviendas de nueva obra vendidas al año. El sector promotor planea, además, empezar a retribuir a sus accionistas a partir del año 2020, aunque lo hará de manera escalonada empezando por Neinor, seguido de Aedas y Metrovacesa, con dividendos comprometidos de entorno al 30 por ciento de payout sobre sus ganancias. En la mitad: socimis Las firmas dedicadas a la gestión del alquiler, en cambio, fueron las primeras en arrancar la nueva era del inmobiliario en España. Saltaron a bolsa en 2014, lo que las ha llevado ya a situarse en la mitad del camino. Traducido, esto significa que las socimis nacionales aspiran -trazando un perfil mucho más anglosajón al estilo reit- a convertirse en vehículos algo más aburridos, lo que supone invertir cada vez menos para centrarse, sencillamente, en la gestión de las rentas que terminarán al final en el bolsillo de los accionistas -ya que reparten un mínimo del 80 por ciento de sus beneficios en dividendos-. Lo llamativo en el caso de las socimis es que, a pesar de que también cotizan con descuento -todas, salvo Hispania, centrada en el arrendamiento de hoteles, que lo hace con una prima del 4,8 por ciento- también han llevado a sus acciones a zona de máximos históricos, como es el caso de Merlin Properties (cuyo negocio principal son las oficinas), Lar España (centrada en centros comerciales) e Hispania. De todas ellas, el vehículo conducido por Ismael Clemente ostenta la mejor recomendación de compra de todo el sector.