Vencen autopistas en España, Argentina y Brasil, que aportan 1.029 millones"El accionista ha ganado ya". El presidente de Abertis, Salvador Alemany, subrayó ayer el positivo impacto que ha tenido sobre la cotización de la empresa la guerra de opas que han librado durante los últimos meses Atlantia y Hochtief. Un proceso que, sin admitirlo explícitamente, espera que terminará con el acuerdo de la compañía italiana y de la filial de ACS para tomar el control de la concesionaria y, por tanto, sin que haya mejoras de la última oferta de Hochtief, fijada en 18,36 euros por título. Su estimación es que el proceso culminará en mayo. Alemany se remitió en constantes ocasiones al deber de pasividad y a la prudencia para evitar valorar las posibles operaciones, tanto en la rueda de prensa previa a la junta de accionistas como durante la asamblea. Aunque admitió que puede haber impugnaciones de algún fondo por el pacto ACS-Atlantia, insistió en que cualquier decisión que tome el accionista "va a ser más buena o menos buena, pero va a ganar". Hizo, al mismo tiempo, un llamamiento a los compradores para que sigan proyectando "el camino de éxito" que ha recorrido la empresa y ayuden a conseguir un proyecto "más grande". Un objetivo que enfrenta, sin embargo, no pocos obstáculos con el vencimiento durante los próximos cuatro años de varias autopistas en España, Brasil y Argentina, que aportan 1.029 millones de euros al resultado bruto de explotación (ebitda), casi un tercio del total de 2017 (3.480 millones). Los vencimientos más relevantes tendrán lugar en España, salvo que el Gobierno cambie su posición respecto a no renovar las concesiones. A este respecto, Alemany volvió ayer a reclamar al Ejecutivo la extensión "armónica y equitativa" del pago por uso en la red de alta capacidad. Fuentes gubernamentales han asegurado a este diario que en el marco de la búsqueda de una solución para que Atlantia no tome el control de las autopistas españolas, podría prorrogar los contratos de Abertis, que en el futuro quedarían en manos de ACS. Abertis afronta a finales de 2019 la terminación de los dos tramos de la AP-7 entre Tarragona y Alicante y el de la AP-4 Sevilla-Cádiz de Aumar, con una longitud de 468 kilómetros. Esta sociedad aportó 248 millones al ebitda del grupo en 2017. Para 2021 le llegará el turno a Acesa, que explota cuatro tramos de la AP-7 y uno de la AP-2,con casi 480 kilómetros y que elevó su ebitda a 411 millones. Igualmente, en 2021 finalizan los contratos de titularidad de la Generalitat de Cataluña de Invicat, correspondientes a los tramos de la C-32 Montgat-Palafolls y de la C-33 Barcelona-Montmeló. Con 66,5 kilómetros, su peso en el ebitda global asciende a 101 millones. Todos estos vencimientos afectan a 1.012,4 kilómetros y tendrán un impacto de 760 millones, el 84,5 por ciento del ebitda que genera el mercado español. La empresa ha dotado 100 millones para devolver Acesa y Aumar a la Administración "en perfecto estado". Además, Abertis encara en Argentina el fin de dos contratos en 2018 y 2020, que aportan 77 millones, mientras que en 2019 finaliza el de Autovias, en Brasil (192 millones).