Mario Rovirosa, que llegó hace dos años de Chiesi, será el nuevo consejero delegadoLa farmacéutica catalana Ferrer anunció ayer el nombramiento de Mario Rovirosa como nuevo consejero delegado de la compañía en sustitución de Jordi Ramentol, que llevaba 18 años en la compañía -14 de ellos como consejero delegado- y que seguirá vinculado a Ferrer como miembro del consejo de administración. Ramentol -que fue presidente de la patronal Farmaindustria entre 2010 y 2012- llegó a los laboratorios Ferrer en 1999 tras haber desempeñado su carrera profesional en la química Basf y la farmacéutica Lacer. Ocupó entonces el puesto de director general corporativo y posteriormente en 2004 fue nombrado consejero delegado, tras la jubilación de Rafael Foguet. En un comunicado, la farmacéutica controlada por la familia Ferrer-Salat ha precisado que el relevo se hará efectivo a partir del 1 de abril. El presidente Sergi Ferrer-Salat ha agradecido a Jordi Ramentol "sus 18 años de servicio a Ferrer" y ha añadido que Mario Rovirosa "es el relevo perfecto para afrontar con éxito los nuevos retos que vivirá la compañía durante los próximos años". El nuevo consejero delegado de Ferrer es licenciado en Administración de empresas y tiene un MBA por Esade. Rovirosa se incorporó al grupo Ferrer en mayo de 2016 como director general del área de farmacéutica. Antes de ello ejerció como director general en España de la empresa Chiesi y tuvo otros cargos en empresas como Prodesfarma o Almirall. El grupo Ferrer factura unos 800 millones anuales y mantiene cuatro plantas de producción farmacéutica y dos plantas de producción química.