En plena investigación por parte de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) por un posible abuso de posición dominante, Mediaset España anunció ayer un estancamiento de sus in-gresos en el último ejercicio. La empresa que dirige Paolo Vasile cerró el año con una facturación de 996,3 millones de euros, lo que supone tan solo un 0,4 por ciento más que un año antes. A pesar de este parón en el crecimiento, la empresa obtuvo un beneficio neto de 197,5 millones, un 15,5 por ciento más, gracias fundamentalmente a la reducción de costes. El resultado neto obtenido representa así un margen sobre ingresos totales del 19,8 por ciento.