Abengoa se reunirá con los accionistas minoritarios el próximo miércoles, 7 de febrero, en la sede del grupo en Sevilla para dar cuenta del estado actual de los temas más relevantes de la compañía. Según reza en la convocatoria, abierta a todos los pequeños inversores, la dirección de la ingeniería atenderá las cuestiones que se planteen, en un momento en el que a pesar de las medidas adoptadas la acción sigue en niveles mínimos. Se trata de una iniciativa novedosa en Abengoa, que en estos momentos está inmersa en una serie de operaciones muy importantes para su futuro. La más inmediata será el cierre de la venta del 25 por ciento de Atlantica Yield a Algonquin Power & Utilities por 607 millones de dólares (522 millones de euros). En un horizonte próximo también tiene entre manos deshacerse del 16,5 por ciento restante que tiene en la yieldco. Por este paquete también tiene interés la compañía canadiense, aunque podrían entrar fondos como Brookfield. En paralelo, Abengoa y Algonquin ya están trabajando en la nueva sociedad conjunta para pujar por proyectos de energía y agua, AAGES. La compañía canadiense, además de Atlantica Yield, tiene sus ojos puestos en el proyecto estrella de la ingeniería sevillana, la planta de cogeneración A3T, en México. Su valor rondaría los 500 millones y Algonquin tiene un derecho preferente durante su construcción -hasta el tercer trimestre, previsiblemente-. Otras cuestiones que Abengoa trató en el pasado y que ahora no tiene en perspectiva es la ejecución de un contrasplit (agrupación de acciones) ni la fusión de los títulos A y B.