La propuesta incluye 1.118 despidos en las sucursales y 817 en servicios centralesBankia desveló ayer el volumen de empleados que se verá afectado por el proceso de reestructuración como consecuencia de la próxima integración de BMN. La dirección de la entidad informó a los sindicatos, en la segunda reunión informal para abordar el ajuste, que despedirá a unos 2.510 empleados, es decir, algo más del 14 por ciento del grupo resultante y una cuantía que representa a dos tercios de la actual plantilla de la firma absorbida. El número coincide con las últimas estimaciones realizadas por los sindicatos y con el censo de mayores de 55 años de edad. No todos los afectados son trabajadores de BMN, pero sí la gran mayoría. Los datos ofrecidos por la entidad se basan en un informe realizado por Oliver Wyman para abordar este proceso y conseguir las sinergias de costes prometidas en el plan de absorción a tres años, de 155 millones. El reparto de los despidos, según explicó Bankia, se distribuye en 817 en los servicios centrales (BMN tiene en este departamento asignados poco más de 600); 1.119 en las sucursales y en los centros territoriales que apoyan a la red comercial; 375 que se habían acogido a las excedencias del banco absorbido; y unas 200 que trabajan en la división de multicanalidad -atención electrónica y telefónica-. 250 sucursales Bankia aún no ha precisado el ajuste de las oficinas, pero los sindicatos asumen que llegará a unos 250, es decir, el 35 por ciento de BMN o el 10 por ciento del nuevo grupo, a pesar de la poca duplicidad existente. De hecho, solo se produce un cierto solapamiento en Alicante y Madrid. La integración, en principio, se cerrará a finales de este mes, una vez se obtengan todas las autorizaciones. El grupo nacerá con 17.500 trabajadores, de los que 4.000 procederán de BMN, y unas 2.500 sucursales (casi 700 de ésta última). Las negociaciones formales se iniciarán en enero, aunque antes se producirán otras dos reuniones informales. Los sindicatos esperan reducir al máximo posible el número de bajas y lograr las mejores condiciones de salida, sin medidas traumáticas. Tanto Bankia como BMN han sido dos de las entidades que más recortes han sufrido durante la crisis, como consecuencia de las necesidades y de las imposiciones de Bruselas a raíz de las ayudas públicas otorgadas, que en conjunto ascienden a 24.100 millones de euros. Ajustes previos BMN, en concreto, ha visto cómo su plantilla se ha ido reduciendo desde su nacimiento, en 2010, desde los 9.800 empleados, es decir, un 60 por ciento. En esta cifra se incluyen los trabajadores traspasados al Sabadell en la venta del negocio de Caixa Penedés. En el caso de Bankia, el ajuste alcanza el 46 por ciento. Su matriz, BFA, se constituyó con 25.000 trabajadores de las siete cajas fundadoras y en la actualidad tiene unos 13.500. La entidad absorbente pretende destinar 334 millones a los costes de la reestructuración que iniciará una vez concluyan las negociaciones con los sindicatos y que se prolongará, en principio, a lo largo de todo el próximo ejercicio.