La entidad ostenta ya el 14,4% del capital tras otra conversión de deuda en títulosHSBC se ha convertido en el tercer accionista de Prisa tras otra conversión obligatoria de deuda del grupo en acciones. La entidad británica, que ha acudido en varias emisiones al rescate de la dueña de La Ser y El País, ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que ya posee el 14,4 por ciento del grupo de comunicación que todavía preside Juan Luis Cebrián frente al 9,56 por ciento que ostentaba desde julio de 2014, cuando se convirtieron los primeros bonos. Así, y según los datos que ahora constan en la CNMV, HSBC ha arrebatado el puesto a Telefónica que hasta hace una semana era el tercer accionista de la dueña de El País con el 13,06 por ciento del capital. El primer accionista sigue siendo Amber Capital con un 19 por ciento y el segundo es la familia Polanco con el 17,5 por ciento de la compañía. El fondo de inversión se ha erigido como el principal rival de Cebrián en la compañía y lleva más de un año buscando su destitución por los malos datos de la firma y los problemas que tiene para vender Santillana por un buen precio. Prisa no ha confirmado qué emisión de bonos convertibles está detrás de este cambio en el capital de la compañía, pero no hay que olvidar que la entidad británica ha acudido a varias en los últimos años. La última, a principios de 2016, cuando Prisa anunció que había alcanzado un acuerdo con algunos de sus principales acreedores para llevar a cabo una emisión de bonos convertibles en acciones por importe de 100 millones de euros y ampliable hasta 150 millones. HSBC, Santander y CaixaBank se comprometieron suscribir la emisión y fue justo la entidad británica la que más se comprometió. Acordó canjear por acciones deuda por un importe de 80,96 millones de euros. Los bonos tenían una vida de dos años. Casi dos años después de ese anuncio, el grupo todavía presidido por Juan Luis Cebrián aprobó el pasado 15 de noviembre otra ampliación de capital, esta vez por valor de 450 millones de euros, que, salvo sorpresa, será suscrita por sus principales accionistas. Este aumento servirá para reequilibrar su situación patrimonial ya que en 2018 tiene que hacer frente a vencimientos de deuda por 956,5 millones y tiene problemas para refinanciarla.